El 13 de octubre de 1981 el Congreso de la República de Guatemala emitió el Decreto No: 0035 que declara el 27 de octubre de cada año como «Dí­a del Artista Nacional», fecha en la cual gozarán de asueto, o en su defecto, de pago extraordinario de su salario por las labores que en cumplimiento de su trabajo realicen los artistas en la fecha mencionada».

Esto significaba más que una simple celebración. Es un reconocimiento a los 19 artistas que perdieron la vida el 27 de octubre de 1951 cuando regresaban de participar en «La Hora Cultural» que el Ejército organizaba para llevar entretenimiento a las zonas militares y el avión en que viajaban se estrelló contra el Cerro Raxón pocos minutos después de elevarse. Desde entonces a la fecha este dí­a es celebrado con actividades de conmemoración, y reconocimiento para quienes se dedican a cultivar las bellas artes. Muchos artistas han sido premiados por distintas organizaciones como «El arco iris maya» y «Premio artista del año». Sin embargo fue hasta la creación del Instituto de Previsión Social del artista según Decreto del Congreso de la República emitido el 20 de diciembre de 1990 y publicado el 15 de enero de 1991 que se inició con una verdadera dignificación, pues la institución fundada por Carlos Ovalle y Ricardo Bonilla «como una entidad autónoma, con personalidad jurí­dica, patrimonio propio, con facultades para adquirir derechos y contraer obligaciones y jurisdicción administrativa en toda la República, para conocer y resolver asuntos de su competencia, regula sobre su creación, duración y objetivos, afiliados, organización y administración, estructura orgánica, Asamblea General, Junta Directiva, Gerencia, beneficiados, prestaciones y servicios, jubilación, pensión por invalidez, régimen financiero, Timbre de Garantí­a Artí­stico, contabilidad y fiscalización, exoneración»; se ha preocupado por hacerlo. Este año la Junta directiva presidida por: Isabel Trejo, e integrada por Luis Gutiérrez, Benjamí­n Cux, Carlos Marroquí­n, Oliver Silva, Carlos Marroquí­n Marroquí­n, Rudy Melgar y Ernesto Bailey visitaron el monumento al artista en El Petén, inauguraron la Casa de la Cultura de la Institución, develaron una placa en las clí­nicas de psicologí­a, con el nombre de Sara Elena Ovalle y este dí­a entregaron el Aplauso de Oro, máxima condecoración a Raymundo Coy y Gilberto Hernández, así­ como cuatro pensiones y 16 jubilaciones a artistas miembros. Una verdadera labor en pro del artista nacional, más que sólo una foto para la historia.