El número dos del tenis mundial, Roger Federer, negó ayer estar relacionado con el caso de un ejecutivo de la empresa que le representa, IMG, que habría apostado grandes cantidades en eventos deportivos, incluidos partidos del suizo.
La información apareció en el New York Times y en ella se recogía que Ted Forstmann había apostado millones de dólares, sin dejar de lado los partidos de Federer, incluida la final que perdió en 2007 en Roland Garros ante el español Rafael Nadal.
«No he hablado con él (Fortsmann). Nunca dije que lo había hecho», dijo Federer en París, donde disputa el Masters 1000 de París-Bercy. Su representante, Tony Godsick, trabaja para IMG.
«Es una pena que mi nombre aparezca ligado a algo sobre lo que no tengo control. Es algo malo que gente tan relacionado con el deporte haga apuestas, pero no puedes controlar qué hacen los demás», añadió.
Federer recordó que Fortsmann no es su agente, sino un directivo de IMG, y dijo no estar preocupado por el caso.
El primer cabeza de serie en París-Bercy alcanzó este miércoles los octavos de final tras superar por un doble 6-4 al local Richard Gasquet.