La presencia del actor Michael Fassbender y el estreno en la sección oficial de la cinta española «La voz dormida» acapararon ayer el protagonismo de la jornada en el Festival de Cine de San Sebastián.
En el ecuador de la 59na. edición del certamen, Fassbender llegó a la ciudad a lomos de su moto para delirio de decenas de seguidores —mujeres en su mayoría— que aguardaban su llegada a un céntrico hotel de la localidad vasca.
El actor presentó la película «Shame», en la que su papel de alcohólico le valió recientemente el premio a la mejor interpretación en el festival de Venecia.
Junto a Fassbender —y con un día de retraso_, la actriz francesa Catherine Deneuve fue otra de las estrellas que se dejó ver en el festival, donde participó en la retrospectiva que dedica este año el certamen al director Jacques Demy.
Deneuve es una de las actrices más queridas en San Sebastián, que en 1995 le concedió un Premio Donostia en reconocimiento a toda su carrera.
Pero no sólo brillaron estrellas en la alfombra roja de esta bella ciudad del norte de España, a orillas del Mar Cantábrico.
Uno de los momentos más esperados de la jornada fue el estreno en la sección oficial de «La voz dormida», la más reciente cinta del español Benito Zambrano y una de las favoritas para hacerse con la Concha de Oro, máximo galardón del festival.
Inspirado en una novela homónima de la escritora Dulce Chacón, el filme cuenta la historia de un grupo de mujeres encarceladas poco después de la guerra civil española (1936-1939).
«Lo que la película quiere decir es que esa guerra nunca debió haber ocurrido. Ninguna guerra debe de ocurrir», dijo Zambrano en rueda de prensa. «Lo que el arte y la cultura intenta hacer siempre es mostrar que podemos ser mejores de lo que somos».
«Creo que la película intenta mostrar una parte de la historia no sólo para que no se repita, sino para que aprendamos algo», agregó.
A una pregunta sobre si el cine español es demasiado insistente en abordar dramas sobre el conflicto bélico, Zambrano defendió que lo importante es narrar buenas historias.
«Hay muchas películas, historias que contar si tenemos en cuenta que la república, la guerra civil y la posguerra han sido de los acontecimientos más importantes de la historia de este país en los últimos 100 años», señaló. «Todavía vivimos y convivimos con todo lo que pasó».
«Al fin y al cabo, estamos hechos de historias. Habrá muchas películas que tendremos que contar de todo esto», añadió en referencia a la guerra civil.
«La voz dormida» es una de las tres cintas preseleccionadas por la Academia de Cine Española para representar al país ibérico en la próxima edición de los Oscar, en la categoría de mejor película de lengua extranjera.
La terna de aspirantes la completan «La piel que habito» de Pedro Almodóvar y «Pa negre» («Pan negro») de Agustí Villaronga. La Academia anunciará la candidata definitiva el próximo miércoles 28 de septiembre.
En la carrera por la prestigiosa Concha de Oro, también se presentaron la cinta china «11 flores», del director Wang Xiao Shuai, y la portuguesa «Sangue do meu sangue» («Sangre de mi sangre»), de Joao Canijo.
«11 flores» narra el encuentro fortuito y la relación que se establece entre un niño de 11 años y un asesino en fuga. Mientras que la cinta portuguesa dibuja la compleja vida de una madre soltera con dos hijos en la periferia de Lisboa.
El jueves se espera el estreno de la primera cinta latinoamericana que opta a la Concha de Oro, «Los Marziano», de la argentina Ana Katz. Además de la directora asistirá al festival uno de los actores, el popular Guillermo Francella.