Extradición de Bout provoca ira de Rusia


Viktor Bout fue extraditado hoy por Tailandia a Estados Unidos. FOTO LA HORA: AP Apichart Weerawong

Tailandia extraditó hoy al presunto traficante de armas ruso Viktor Bout, el llamado «mercader de la muerte», que fue embarcado en un avión norteamericano rumbo a Estados Unidos, provocando una enérgica reacción de Rusia.


La decisión del gobierno tailandés, sometido a la presión contradictoria de Estados Unidos y Rusia, puso fin una saga diplomática y judicial que duró dos años y medio.

«Esta historia es un ejemplo de injusticia extrema», declaró el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, en una rueda de prensa en Kenia, donde se encuentra de visita.

«Rusia, como paí­s, seguirá apoyándolo por todos los medios», agregó Lavrov.

Bout, ex piloto de las fuerzas armadas soviéticas, habí­a sido detenido en Bangkok en marzo de 2008 después de reunirse con agentes norteamericanos que se hací­an pasar por responsables de la guerrilla colombiana de las FARC.

En Estados Unidos, Bout puede ser condenado a cadena perpetua debido a que está acusado de haber utilizado una flota de aviones de carga para transportar armas a ífrica, Sudamérica y Medio Oriente.

Bout, que habla seis idiomas y utilizó seis alias en los últimos años y habrí­a inspirado el personaje de la pelí­cula «Lord of War» protagonizado por Nicolas Cage, afirma por su lado que ha desarrollado una actividad de flete perfectamente legal.

«Bout abandonó el suelo tailandés a las 13H27 (06H27 GMT) desde el aeropuerto Don Muang», dijo el coronel Supisarn Bhakdinarunart.

«Yo mismo lo embarqué en un avión estadounidense donde habí­a seis responsables norteamericanos para escoltarlo», agregó el jefe policial.

«La próxima etapa de su vuelo es secreta, pero el destino final es Estados Unidos», indicó el coronel Supisarn.

El gobierno tailandés, sometido a la presión de Estados Unidos, aliado histórico que pedí­a la extradición de Bout, y Rusia, socio comercial y estratégico que querí­a recuperarlo, optó finalmente por satisfacer al gobierno estadounidense.

Bout, de 43 años, fue rápidamente extraditado después de que el gobierno anunciara su decisión, siendo en pocas horas llevado de la cárcel a los servicios de inmigración y luego entregado a los norteamericanos en el aeropuerto.

Alla Bout, esposa del acusado, llegó demasiado tarde para despedirse de su marido en el aeropuerto, de donde se retiró llorando en compañí­a del abogado tailandés del traficante, según pudo comprobar la AFP.

«Todo fue tan rápido. Es extraño. Por supuesto, Alla está preocupada. No esperaba eso», dijo Andrei Dvornikokv, cónsul ruso en Bangkok.

El método expeditivo contrasta con las idas y venidas del expediente desde marzo de 2008.

La justicia tailandesa habí­a aceptado en agosto que Bout fuera extraditado para ser juzgado por «terrorismo» en Estados Unidos, pero el procedimiento estaba bloqueado por una segunda denuncia por «blanqueo» y «fraude» presentada por los norteamericanos ante el temor de que la primera demanda fracasara.

Finalmente el tribunal penal de Bangkok desestimó la segunda denuncia diciendo que no «presentaba suficientes pruebas», abriendo así­ la ví­a a la extradición.

La defensa de Bout intentó un último recurso pero sin éxito.

El abogado ruso de Bout dijo el martes que su extradición era «ilegal», aunque admitió que será «imposible anular u objetar esa decisión» cuando su cliente se encuentre en territorio norteamericano.