Por César Sabogal
Artistas, funcionarios y expertos musicales de Iberoamérica debaten en la colombiana Medellín sobre el auge e inclusión de sus ritmos en el mercado mundial de la música, donde lo «autóctono» goza de un creciente reconocimiento, según dijeron.
«Los ritmos de Latinoamérica y de España acaparan la atención mundial. Nuestros artistas dominan hoy el mercado global de la música, pero atención, de nosotros depende que sea un fenómeno pasajero o que se proyecte a nivel histórico», advirtió el historiador mexicano José Luis Paredes.
Paredes, que intervino este jueves en un foro sobre nuevos ritmos, aseguró a la AFP que urge en la región «la consolidación de una empresa disquera iberoamericana sólida que promueva en los grandes mercados la consolidación de la rica diversidad musical de la región».
A su turno, Iván Benavides, coordinador musical del III Congreso Iberoamericano de Cultura considera que «gracias a que Iberoamérica superó un complejo de inferioridad musical frente a la cultura anglosajona, los ritmos latinoamericanos están a la vanguardia».
«Recuerdo que hace 15 años cuando (el artista colombiano) Carlos Vives lanzó su primer disco «Clásico de la provincia» los puristas del (ritmo) «Vallenato» se rasgaron las vestiduras. Hoy, el disco es reconocido internacionalmente como ícono de ese género de nuestra región», añadió.
El cantante uruguayo Jorge Drexler –otro de los músicos invitados y ganador de un premio Oscar en la categoría «Mejor canción original» por su tema titulado «Al otro lado del río», para la película «Diarios de Motocicleta»– celebró la riqueza cultural de la música iberoamericana.
«Nuestra música es producto de cientos de años, de muchas experiencias, de historia. Cosechamos todo un legado durante años y ya es hora de recoger los frutos», dijo Drexler.
Mientras su colega, el cantautor argentino León Gieco, dijo que si bien no pretende «parecer omnipotente como artista y creer que la música lo cambia todo, ésta si ha permitido a los latinoamericanos participar a nivel global en actividades que son muy importantes como para dejárselas a los políticos».
Con unos 7 mil asistentes, entre público, expertos, ministros de cultura de 22 países de Iberoamérica y artistas, el congreso de cultura de Medellín se centra, hasta el próximo domingo, en los aspectos relacionados con la música, con talleres, conciertos, charlas y ruedas de negocios.
La ministra colombiana de cultura, Paula Marcela Moreno, celebró la alta participación a este encuentro, el más importante que a nivel cultural realiza su país en el año 2010. «Los artistas han presentado lo mejor de su repertorio, y toda la programación se cumple a cabalidad», dijo.
Según la funcionaria, las conclusiones que resulten de este evento «serán trascendentales para la cultura de la región, especialmente en el campo musical, pues están presentes en Medellín los mejores exponentes de la música de toda Iberoamérica», concluyó.
En el evento también participan el director orquestal venezolano José Abreu -fundador del Sistema Nacional de Orquestas Infantiles y Juveniles de su país- y la emblemática figura del rock en español, el argentino Fito Páez; así como los españoles Rosario y Antonio Carmona.
El Congreso fue instalado el jueves por el presidente colombiano ílvaro Uribe.