Líderes de derechos humanos, entre ellos la Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú, anunciaron ayer que redoblarán esfuerzos por lograr la orden de captura contra el ex dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt por el delito de genocidio.
«Â¿Qué es lo que queremos? Justicia», «Por los torturados, muertos y detenidos-desaparecidos ¿qué exigimos?, justicia», «Â¿Qué pedimos contra Ríos Montt? Que lo detengan», coreaban al unísono unos 100 activistas frente a la Corte Suprema de Justicia de la capital para demandar la captura del ex dictador.
«La justicia verdadera y real llegará hasta que giren la orden de captura contra Ríos Montt, el principal genocida del país», dijo la directora de la organización Familiares de Detenidos-Desaparecidos de Guatemala (Famdegua), Aura Elena Farfán, quien perdió a un hermano en 1984.
Los activistas se movilizaron luego que una jueza ordenó el lunes la captura de cuatro militares y civiles involucrados en asesinatos y violaciones de derechos humanos en los años 80, incluida la quema de la embajada de España.
Sin embargo, Ríos Montt, acusado de genocidio ante la Audiencia Nacional de España, no figuró en las órdenes de captura.
«No hay injusticia que dure 100 años, pero tampoco un pueblo que la aguante», dijo Farfán al tomar el megáfono de consignas en el atrio de la Corte, donde colocaron las fotografías de 22 muertos durante la guerra, entre ellos las de los sacerdotes españoles José María Gran Cirera y Carlos Pérez Alonso.
La titular del Tribunal Quinto de Sentencia Penal, Morelia Ríos, avaló la noche del lunes la solicitud de la Audiencia Nacional de España para arrestar a cuatro de ocho sindicados por la masacre de la embajada de España en Guatemala, que fue incendiada el 31 de enero de 1980, cuando un grupo de indígenas reclamaba por el respeto a los derechos humanos.
Un total de 39 personas murieron quemadas, incluidos varios diplomáticos españoles como el cónsul Jaime de Arbol, además de un ex vicepresidente y un ex canciller guatemalteco. Por la quema de la embajada España rompió relaciones diplomáticas con Guatemala durante cuatro años.
Después de la resolución de la jueza, fue detenido y enviado a una prisión preventiva el ex ministro de la Defensa, Angel Guevara, mientras que el ex director de la Policía, coronel Germán Chupina, fue internado en un hospital por quebrantos de salud y está custodiado por la policía.
Mientras tanto, la policía sigue tras el ex dictador Oscar Mejía Víctores (1983-1986) y el civil Pedro García Arredondo, ex jefe de una unidad élite de la policía acusada de desapariciones (1978-1982).
Sin embargo, la jueza dejó fuera a Ríos Montt, así como al civil Donaldo Alvarez, ministro del Interior en la época.
Ante ello, Menchú volvió a la carga este miércoles al asegurar que seguirá luchando hasta alcanzar que Ríos Montt, quien gobernó con mano de hierro entre 1982 y 1983 al dar un golpe de Estado contra Lucas García, sea sometido a la justicia.
La líder indígena explicó que la demanda que interpuso ante la justicia española en 1999 abarca la totalidad de los tres períodos militares desde 1978 a 1986, por lo que no entiende porqué quedó excluido Ríos Montt.