Guatemala es sede del Primer Congreso de Trabajo Psicosocial en el proceso de exhumaciones y desaparición forzada, el cual se llevará a cabo en el Centro de Cooperación Española.

El debate, que durará hasta el 23 del presente mes, busca crear un espacio de discusión y reflexión en materia del seguimiento en el tema de exhumaciones, así­ como crear un programa que pueda dar un apoyo psicológico a las personas que de una forma directa o indirecta han sido ví­ctimas de la guerra.

En Guatemala existe la necesidad de elaborar un protocolo de actuación en el seguimiento de los procesos de exhumaciones, aseguró Susana Navarro, del Equipo de Estudio Comunitario y Acción Psicosocial (ECAP), institución encargada de la organización del evento.

En la inauguración se contó con la participación de una junta de la Procuradurí­a de Derechos Humanos, de la Comisión Nacional de Resarcimiento, y del Alto Comisionado de Naciones Unidas.

Según Navarro, el paí­s fue elegido por ser una de las naciones que mayores exhumaciones ha realizado, las cuales se estiman alrededor de 750 casos. El congreso está auspiciado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y contará con la participación de delegaciones de los cuatro continentes, explico Navarro.

Mario Polanco, del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), especificó que a raí­z de la cantidad de cementerios clandestinos que dejó la guerra interna, Guatemala cuenta con una experiencia muy amplia, la cual puede contribuir al enriquecimiento del tema a nivel mundial.

Especificó además que la importancia de dar seguimiento en el campo psicosocial es un estudio necesario que ayudará a dar una continuidad de todos los casos de quienes fueron afectados.

«También vamos a tener la actividad académica de expertos de otros paí­ses, quienes cuentan con experiencia en trabajo de campo; paí­ses como Argentina y Chile han realizado mucho trabajo de esta naturaleza. Nosotros tenemos dos décadas de acompañamiento psicosocial», expresó.

Según los organizadores, existen redes regionales vinculadas con el tema de exhumaciones forenses, entre ellas se encuentra el Grupo Latinoamericano, en donde se destaca las experiencias de sociedades como las de Argentina y Chile, quienes cuentan con 30 años realizando este tipo de investigaciones.

Según Najarro, uno de los objetivos de este congreso es precisamente crear una red mundial que pueda aglutinar las experiencias en este tipo de hechos.