Ex magnate ruso, declarado culpable


Mijaí­l Jodorkovski fue declarado culpable de lavado de dinero. FOTO LA HORA: AP Sergey Ponomarev

El ex magnate petrolero ruso Mijaí­l Jodorkovski y su principal socio, Platon Lebedev, fueron declarados el lunes «culpables» de lavado de dinero y del robo de millones de toneladas de petróleo, en su segundo proceso, en un caso que marcó la historia judicial de la era postsoviética y provocó indignación en los defensores de los derechos humanos.


«El tribunal ha establecido que Jodorkovski y Lebedev procedieron al robo de bienes en el marco de un grupo organizado utilizando su función profesional», declaró el juez Viktor Danilkin en el tribunal moscovita de Jamovniki.

La justicia rusa inició el lunes el enunciado del veredicto en el proceso de Jodorkovski y Lebedev, contra quienes la fiscalí­a pidió 14 años de prisión.

Este procedimiento va a durar varios dí­as.

Entre 200 y 300 personas, muchas de ellas periodistas, se agolparon el lunes en la mañana ante el tribunal de Jamovniki. Sólo un pequeño grupo logró entrar a la sala del tribunal.

«Â¡Libertad para los presos polí­ticos! ¡Rusia sin Putin!», coreaban algunos simpatizantes de Jodorkovski.

Sus partidarios consideran que el poder trata de alejar definitivamente de la escena polí­tica a Jodorkovski, de 46 años, un ex tenaz opositor al ahora primer ministro Vladimir Putin.

Este hombre de gafas delgadas y cabellos muy cortos es considerado a menudo por los detractores del Kremlin como un «preso polí­tico», culpable fundamentalmente de haber mostrado demasiada independencia y ambición polí­tica frente a Putin.

Sin embargo muchos rusos le reprochan haberse enriquecido ilegalmente durante las polémicas privatizaciones y haber tratado de vender a bajo precio el petróleo ruso a grupos estadounidenses.

En Rusia se considera que el caso Yukos ha sido montado por el gobierno para golpear a un empresario demasiado independiente, que financiaba a la oposición y no dudaba en contradecir al presidente de la época, Vladimir Putin.

Ex patrón de Yukos, grupo emblemático de la industria petrolera desmantelado en provecho de empresas cercanas al poder, Jodorkovski y Lebedev son juzgados desde marzo de 2009 por el robo de 218 millones de toneladas de petróleo.

Los dos hombres, encarcelados desde 2003, cumplen ya una condena de ocho años por estafa a gran escala y evasión de impuestos.

El enunciado del juicio debí­a inicialmente comenzar el 15 de diciembre, pero fue aplazado hasta el 27 de diciembre sin explicaciones.

El pasado 16 de diciembre Putin declaró que los «crí­menes» de Jodorkovski habí­an sido «probados» en el segundo juicio y que «todo ladrón tiene que ir a la cárcel».

A su vez, el presidente Dimitri Medvedev estimó que ningún responsable ruso tení­a el derecho a expresar su posición antes del juicio, sin por ello condenar las declaraciones de Putin.

Igor Yurguens, un consejero del presidente Medvedev, estimó que la absolución de Jodorkovski serí­a «justa» y «pragmática» al término de su segundo proceso.

Para numerosos observadores, este proceso pondrá a prueba el tono liberal demostrado por Medvedev, y enviará una señal para la elite y los inversores extranjeros.

«Es una pesadilla. Este juicio entierra todas las declaraciones sobre la modernización del paí­s», declaró el opositor liberal Boris Nemtsov.

ALEMANIA «Paso atrás»


El ministro alemán de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle, se mostró «muy preocupado» por la condena el lunes del ex magnate petrolero ruso Mijaí­l Jodorkovski en un segundo proceso por fraude, en lo que calificó de «un paso atrás» para Rusia.

«La manera como el proceso fue llevado a cabo es en extremo dudosa y (representa) un paso atrás en el camino a la modernización del paí­s», señaló el jefe de la diplomacia alemana en un comunicado.

«Está en el interés de nuestros socios rusos tomar estas preocupaciones seriamente y proteger el estado de derecho, la democracia y los derechos humanos», añadió.