El triunfalismo de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y de ílvaro Colom, que era evidente en la ví­spera de la primera vuelta es precisamente el mismo que ahora personifica el Partido Patriota (PP) y Otto Pérez, que incluso con una alta dosis de arrogancia han materializado con la negativa a participar en los debates presidenciales, porque temen perder la ventaja que, según sus seguidores, habrí­an obtenido, tras intensificar su campaña en los medios de comunicación masivos.

La Universidad de San Carlos, la Procuradurí­a de los Derechos Humanos y el Arzobispado de Guatemala en un esfuerzo conjunto habí­an organizado un debate presidencial en los canales abiertos de televisión con el propósito que los electores tuvieran más elementos de juicio para emitir un voto consciente y responsable este 4 de noviembre, sin embargo, uno de los altos ejecutivos de la televisión nacional dispuso que sólo con la presencia de Colom no valí­a la pena.

Pérez tampoco aceptó la invitación al debate presidencial de una importante cadena de televisión norteamericana, que ante su negativa dispuso entrevistar solo a Colom, como también lo decidieron con buen tino varios medios locales, ante la renuencia del candidato presidencial de la mano dura y la necesidad que se percibe en el ánimo de los electores, porque ambos candidatos presidenciales los convenzan, principalmente el 30% del electorado que aún se encuentra entre los indecisos.

La ventaja que habrí­a capitalizado Pérez sobre Colom, según las encuestas publicadas, oscilan entre 8.8%, 7.6% y 2.5% a su favor, mientras que la empresa encuestadora pagada por la UNE sostiene que la ventaja no es superior a los porcentajes de error, reportada por sus colegas en sus trabajos de medición. De tal suerte, algunos analistas creen que los guatemaltecos despertarán el 5 de noviembre con un presidente electo por una mí­nima diferencia y un alto porcentaje de abstencionismo.

A diez dí­as de la segunda vuelta electoral, ambos contendientes se preparan para el sprint final de su carrera en la búsqueda de la Presidencia de la República. Tanto Pérez como Colom tienen previsto continuar sus giras departamentales y cerrar su campaña con sendas concentraciones y por supuesto atiborrar los medios de comunicación masivos, principalmente electrónicos con sus mensajes de esperanza por un lado y de coraje por otro, llamando al voto este 4 de noviembre.