Juan Pensamiento Velasco, A-1 104641, jpensamiento@gmail.com
Una amiga, otrora, casada con un desgraciado, está por recibir una cantidad relativamente fuerte correspondiente a los alimentos que dicho imbécil le ha negado a su hijo por los últimos tres años; el dinero fue depositado por él, maliciosamente, en la tesorería del Organismo Judicial. Pues resulta que no menos imbécil es la disposición administrativa del Organismo Judicial que le impide a mi amiga recibir un cheque por la cantidad completa, y la limita a retirarlo por fracciones que, para su total, son ínfimas y la obligan a tener que retirar el máximo permitido durante 50 días seguidos. ¿Qué acéfalo tomó esa decisión? ¿Y si le urgiera el dinero?