El ministro de Economía argentino, Amado Boudou, estimó este lunes que el 60% de los bonistas que adquirieron títulos argentinos, entre ellos muchos italianos, adherirán a la nueva oferta de canje de deuda presentada por primera vez en Roma.
«Básicamente esperamos un piso del 60% de aceptación para intentar cerrar definitivamente este problema», declaró el ministro en el curso de una conferencia de prensa.
«Es la última oportunidad», advirtió Boudou, quien estaba acompañado por el secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino, y un equipo de técnicos para ilustrar la propuesta.
Argentina ofreció a los tenedores de bonos de su deuda en cesación de pagos canjear títulos a un tercio de su valor nominal, pero con un menú de nuevos títulos que le dan un valor real de mercado por encima del 50%.
La propuesta contempla una oferta diferenciada para los bonistas minoristas, muchos de ellos italianos, con tenencias de hasta 50.000 dólares, que no tiene quita y reconoce los intereses devengados desde 2005 con un pago en efectivo.
Tenedores de bonos italianos, muchos de ellos jubilados, rechazaron ingresar al primer canje de 2005, cuando adhirieron 76,15% de bonistas tras el default sobre casi 100.000 millones de dólares en 2001.
«Estamos aquí para decirles, cara a cara, que la propuesta es buena, que las condiciones son razonables, que no sigan el canto de las sirenas», aseguró Boudou, quien regresará a Italia el 17 y 18 de mayo, «como señal de la importancia que damos a ese sector».
El equipo económico argentino se reunió con asociaciones de consumidores y representantes de los bonistas italianos, y se mostró optimista por «la buena recepción», según reconoció el ministro.
«Tal vez no fueron en el pasado adecuadamente asesorados. Ahora tienen la prueba de que Argentina ha pagado sus deudas; aún en el 2009 cumplió sus obligaciones, un año tan difícil», subrayó Boudou.
Sobre el encuentro con Nicola Stock, presidente de la Task Force Argentina (TFA), que representa a 180.000 italianos tenedores de bonos por 4.300 millones de dólares, no quiso adelantar informaciones y confirmó que tiene programadas nuevas reuniones para mediados de mayo.
En total quedan 19.000 millones de dólares de deuda en default por canjear.