En mayo se celebra el Dí­a Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo. ¿Qué tan acostumbrados estamos los guatemaltecos a dialogar?

El ejercicio del diálogo, concebido como un proceso discusión y crí­tica constructiva para la resolución de conflictos, es el gran elemento ausente en las estrategias para acabar con los problemas del paí­s.

Esto pese a que el presidente ílvaro Colom asegura que las «mesas de diálogo» -instaladas por agentes gubernamentales- han tenido resultados positivos en varios temas, como la predistribución de la tierra.

Al respecto, organizaciones campesinas coinciden en que los «esfuerzos» del Ejecutivo no tienen ningún resultado efectivo, pues los diálogos son infructuosos cuando únicamente se presentan promesas que no se cumplen.

Frente a la falta de diálogo, y a los escasos resultados de algunos ejercicios de comunicación para la resolución de conflictos, las manifestaciones, bloqueos de carreteras y protestas son al elección de las masas.

El procurador de Derechos Humanos, Sergio Morales, aseguró que la población tiene derecho a manifestarse, de acuerdo con lo establecido en la legislación nacional, no obstante argumenta que las acciones no deben ser violentas.

«Nosotros no nos oponemos a que la población inconforme por algunas situaciones tienen que manifestarse, pero antes que todo se tiene que llegar a un diálogo, si no existe este todo se puede complicar», explicó el magistrado de Conciencia

MARCHAS

El sindicalista Nery Barrios, de la Unidad de Acción Sindical y Popular, sostiene que «en nuestras marchas queremos concienciar a la población sobre los problemas sociales a los que la mayorí­a son indiferentes».

«Por lo general no escuchan las denuncias y demandas, por eso salimos a las calles, bloqueando calles y manifestando nuestras inconformidades; asi nos escuchan y tenemos la posibilidad de llegar a un acuerdo».

Por su parte, el representante del Comité Nacional de Organizaciones Campesinas (CONIC), Rafael Gonzáles, comentó «que el diálogo se ha agotado» pues «hemos seguido un proceso de conversación desde 2008 y hasta la fecha no se ha logrado nada, además de la entrega de dos fincas para campesinos».

«En nuestras manifestaciones hemos dado pasos importantes donde han muerto muchos compañeros, pero lamentablemente en nuestro paí­s así­ se dan las cosas; para nosotros las luchas continuarán hasta que seamos escuchados; lo único que queremos y demandamos es que se respete la tierra, el territorio y que se suspendan las explotaciones y excavaciones mineras». A su vez, Catalino Monzón, representante del Movimiento de Trabajadores Campesinos comento que «el hecho de tantas manifestaciones por parte de las organizaciones sociales es por que no hay propuestas antes de las protestas, pero no hay voluntad polí­tica para poder ayudar a los campesinos y a sociedades pobres del paí­s, el gobierno dice que dará respuesta y no es cierto, las manifestaciones se da no solo por que los dirigente quieran si no porque la población ya está cansada de que nadie les preste atención y solamente se violen sus derechos».

«Los mas afectados son los de las áreas rurales, por las malas polí­ticas, estamos abiertos al dialogo poro no hay voluntad polí­tica de hacer las cosas bien por la sociedad y población, ni tampoco existen programas para apalear la situación de pobreza, crisis, desempleo y sobre todo asesinatos de miles de campesinos que hasta el momento no han dado seguimiento ni investigaciones ante estos hechos».

GOBIERNO

El presidente Colom, en su segundo informe de Gobierno, indicó que «el concenso y el diálogo serán la cohesión, el posible instrumento para llegar a encontrar ese camino de la oportunidad.»

«Lo que ansí­o al gobernar es reducir las distintas brechas que existen en nuestro paí­s, brechas éticas, económicas, territoriales y sociales. Nos distingue la convicción del recurso del diálogo; como muchos guatemaltecos yo ofrecí­ en campaña un diálogo nacional. 47 mesas con temas especí­ficos y a pesar de las crisis hemos tenido poca efervescencia social a pesar de las situaciones criticas», destacó.

Se intentó contactar a Catalina Soberanis, coordinadora del diálogo nacional, pero no contestó los llamados a su celular.