El mercado del trabajo estadounidense continúa mejorando, pero el informe oficial sobre el empleo publicado el viernes en Washington testimonia un neto enlentecimiento de las creaciones de puestos en el sector privado.
Por quinto mes consecutivo, la economía estadounidense creó más empleos de los que suprimió, según este informe mensual del Departamento de Trabajo.
Con 431.000 creaciones netas en mayo, el balance de empleos añadidos por la economía continuó acelerándose, pero más del 95% de esos nuevos puestos son empleos temporarios, para efectuar el censo del decenio que tuvo lugar este año en Estados Unidos.
El empleo en el sector privado desaceleró fuertemente su alza, con solo 41.000 creaciones de puestos, es decir cinco veces menos que el mes anterior. Es el rendimiento menos bueno del sector desde el mes de enero.
Las cifras del Departamento de Trabajo son netamente más débiles de lo que esperaban los analistas, que preveían medio millón de empleos creados, y contribuyeron a hacer caer las plazas bursátiles en Europa y en Estados Unidos.
A pesar de eso, el presidente Barack Obama estimó que estas cifras mostraban que la economía del país «se refuerza día a día».
Según el Departamento de Trabajo, la tasa de desempleo retrocedió 0,2 puntos con respecto a abril, es decir más de lo previsto, para retomar su nivel de marzo: 9,7%. Sin embargo, la baja del desempleo se debió a la baja de la población activa y no a un crecimiento de las personas empleadas.
Esto significa que los puestos creados en mayo beneficiaron sobre todo a las personas que ya tenían trabajo (y que así acumularon varios empleos), mientras que los desempleados llamados «desalentados» se vieron menos inclinados a buscar trabajo que en abril a pesar de una mejor coyuntura.
Aun cuando son decepcionantes con respecto a las expectativas, las cifras del Departamento de Trabajo dejan pensar que la economía estadounidense continúa abriéndose lentamente de la ayuda del Estado.
Estas señales alentadoras se ven reflejadas en el alza de los salarios y de las horas trabajadas en el sector privado, sobre todo en el sector de manufacturas, que empuja la recuperación, y donde las horas trabajadas están en su nivel más alto de los últimos diez años.
Estas cifras son señal de «una fuerte alza del poder adquisitivo para la gente que tiene un empleo», dijo Nigel Gault, economista del instituto IHS Global Insight.
«Seguimos pensando que las creaciones de empleos en el sector privado van a mejorar progresivamente hasta fin de año», precisó Gault, y anticipó que «las empresas van a alcanzar los límites de las horas trabajadas y de ganancias de productividad y así comenzarán a recontratar».
Considerando que «el crecimiento de las contrataciones vinculadas el censo pudo ser un freno a las del sector privado», Peter Newland, de Barclays Capital, estimó asimismo que «la recuperación del mercado de trabajo sigue en movimiento» y anticipó que el ritmo de las contrataciones en el sector privado retomará el alza en el verano.
El economista independiente Joel Naroff llamó por su parte a no demorarse en las variaciones de un mes al otro, sino a mirar la tendencia del empleo desde comienzos de año. Esto permite, señaló, tener «una imagen justa del mercado del empleo: las empresas contratan, pero aún se mantienen muy prudentes».