España aplicará medidas legales en Gibraltar


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España advirtió hoy al Reino Unido que seguirá aplicando todas las medidas legales a su alcance para defender los intereses de sus nacionales en el diferendo por la soberanía del enclave británico de Gibraltar.

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Por JORGE SAINZ, MADRID Agencia AP

El presidente Mariano Rajoy abogó por una solución dialogada con Londres a la reciente escalada diplomática entre los dos países, pero aseguró que hasta que no se retomen las conversaciones España está obligada a hacer cumplir la ley a través de controles fronterizos y de las medidas que sean necesarias.

«El gobierno es partidario de hablar y de dialogar», dijo Rajoy después de su tradicional despacho de verano con el rey Juan Carlos en su residencia de Palma Mallorca, en las mediterráneas Islas Baleares.

«El gobierno se reserva todas las medidas legales. Es decir nosotros podemos y debemos hacer controles», agregó.

La reciente polémica con Gibraltar, cuya soberanía reclama España, comenzó a finales de julio cuando las autoridades gibraltareñas lanzaron 70 pesados bloques de hormigón a la bahía para la creación de un arrecife artificial.

España considera que esas aguas, al extremo sur de la península ibérica, son españolas y calificó la decisión de «inaceptable», así como de un atentado al medio ambiente que daña el trabajo de los pescadores que faenan en la zona.

La respuesta de Madrid fue redoblar sorpresivamente los controles fronterizos en la verja que separa España de Gibraltar, lo que provocó colas kilométricas de entrada y salida de entre cinco y siete horas de espera. La situación llevó al primer ministro británico David Cameron a telefonear a Rajoy el martes para buscar una solución.

Las colas en la frontera han disminuido con respecto a la semana pasada. Mientras se encauza esa solución entre las cancillerías de los dos países, Rajoy insistió en que España está en la obligación de realizar esos controles porque Gibraltar no pertenece al espacio Schengen, que permite el libre tránsito de personas entre la mayoría de países de la Unión Europea.

Miles de españoles y gibraltareños cruzan a diario esa verja para trabajar o comprar.

El mandatario español también restó importancia a la llegada de varios buques de guerra británicos a la zona prevista para fines de agosto. Según Rajoy se trata de una escala conocida por España desde junio en el camino de los buques a unas maniobras militares que se realizarán en el mar Mediterráneo.

Como telón de fondo a estas fricciones más o menos periódicas entre España y el Reino Unido se encuentra una histórica disputa por Gibraltar.

España cedió al Reino Unido la soberanía de este privilegiado enclave geoestratégico al sur de la península ibérica en virtud de los acuerdos alcanzados en el Tratado de Utrecht de 1713, firmado entre los países europeos implicados en la llamada Guerra de Sucesión al trono de España. Los británicos pasaron entonces a controlar el tránsito en las aguas del estrecho de Gibraltar, que separa a Europa del continente africano.

Sin embargo, España lleva años reclamando la devolución del peñón -como parte de un proceso de descolonización inacabado- y considera que el Gibraltar, donde viven unas 30 mil personas, le pertenece histórica y geográficamente.

Además de la soberanía, las relaciones entre los dos gobiernos se han visto afectadas por disputas sobre problemas fronterizos, de aduanas, contrabando, derechos de pesca y de evasión fiscal por parte de las empresas domiciliadas en Gibraltar.