En el marco del Día Mundial de la Salud, autoridades nacionales e internacionales demostraron su preocupación por las consecuencias que tendrá el cambio climático en la salubridad en la población, la cual se verá afectada por enfermedades como la malaria y el dengue hemorrágico, que son transmitidas por insectos de rápida reproducción.
lahora@lahora.com.gt
El ministro de Ambiente y Recursos Naturales, Luis Ferraté, señaló que el incremento de dos grados en la temperatura promedio, que se prevé por el cambio climático global tendría consecuencias fatales para la población, específicamente sobre las comunidades más pobres del país entre las que se cuenta el altiplano occidental donde no se cuenta con medicamentos y alimentos para paliar una crisis nacional.
El ambientalista dijo que hasta hora se reporta un incremento en 0.80 grados desde el año 1950, lo cual ya ha tenido consecuencias lamentables en la producción de alimentos, ya que la inestabilidad climática ha dificultado en gran medida la producción de bienes para el consumo humano.
Ferraté coincidió con el vicepresidente Rafael Espada, quien también se refirió a la necesidad de cambiar la actitud frente al cambio climático y enfrentarlo con acciones concretas que reduzcan los impactos en el medio ambiente.
El delegado de la Organización Panamericana de la Salud, Joaquín Molina, refirió que los efectos pueden ser combatidos solamente con el interés de toda la población, por lo que felicitó a los jóvenes ambientalistas que trabajan para conservar los recursos naturales y que son considerados como un ejemplo a seguir por el resto de la ciudadanía.