Con un barril de crudo que roza los ciendólares, los independentistas sueñan con una Escocia rica gracias a los ingresos petroleros en el mar del Norte, que actualmente se comparten con todo el Reino Unido, aunque los economistas dudan de los beneficios de este divorcio.
Aberdeen, tercera ciudad de Escocia y capital petrolera de Europa gracias a su puerto situado cerca de los principales yacimientos británicos vive un «boom» petrolero.
Con esta coyuntura internacional que favorece un aumento de la explotación en el mar del Norte, sus compañías de servicios no dejan de contratar personal y los signos exteriores de riqueza, desde nuevas mansiones hasta autos de lujo, muestran la prosperidad de esta ciudad de granito del noreste del país.
Pero el resto de Escocia registra un crecimiento menor a la media británica. En los últimos 25 años, la economía escocesa creció un 1,8% frente al 2,3% en todo el Reino Unido.
«En este momento, los ingresos (fiscales) del petróleo van al gobierno británico en Londres» que se encarga de su redistribución. «Esto representará 9 mil millones de libras este año (unos 12 mil millones de euros), según Alex Kemp, profesor de economía petrolera en la universidad de Aberdeen.
Si Escocia llega a ser independiente, «heredaría casi todos los yacimientos petroleros y la mitad de los de gas» británicos, explicó.
El independentista Alex Salmond, que se convirtió en mayo en el primer ministro escocés tras elecciones que colocaron por primera vez al Partido Nacional Escocés (SNP) en el poder, ya sueña con ver a su tierra «superar los resultados económicos de Irlanda».
Los independentistas también estiman que las decisiones económicas tomadas en Londres, como por ejemplo las tasas de las empresas o la política de tipos de interés, merman el desarrollo económico de Escocia.
Pero Alex Kemp no esconde su escepticismo. «La relación financiera (entre Escocia y Londres) es muy compleja y la situación financiera de una Escocia independiente no está clara. Hay un gran debate para saber hasta qué punto Escocia está subvencionada por el resto de Gran Bretaña», declaró.
No hay que olvidar además que el petróleo del mar del Norte se agota y los costes de producción suben por las nubes ya que el tamaño de los yacimientos se va reduciendo.
«El tope en la producción se alcanzó en 1999 y el petróleo seguirá extrayéndose del mar del Norte hasta 2040», estimó Alex Kemp.
Pero Alex Salmond piensa que todavía hay muchos beneficios que sacar del mar del Norte.
«El precio del petróleo en el futuro será más alto que el precio real del petróleo durante estos 30 años, aunque las cantidades sean menores», explicó.
Según él, durante los últimos 30 años, el equivalente de 230 mil millones de libras (más de 300 mil millones de euros) llegaron a las arcas de Londres.
Salmond desea organizar un referéndum sobre la independencia en 2010 pero como su partido de centro-izquierda no tiene mayoría absoluta en la Cámara, deberá convencer a otra formación de la necesidad de votar a favor de esta consulta popular.