El escepticismo y la malicia de los zacapanecos raya en el extremismo, pues dicen que después de la balacera que armó la DEA, el Ejército y la PNC atacando las casas de una familia en La Reforma, creen que por lo menos tuvo que haber unos 25 cadáveres y que de seguro se los llevaron en los helicópteros pues por allí no quedó ninguno.
También dice que admiran la rapidez y la eficiencia de esa familia, pues al día siguiente en las paredes, ventanas y puertas de la casa, no había ni señas de los 10 mil impactos que, supuestamente, recibieron, y la casa parecía como que nada hubiera pasado, ya que todo estaba tan intacto como el día anterior.
Y yo que creía que un operativo de esa naturaleza nunca se llevaría a cabo, por el contubernio que parecía haber entre el gobierno y los narcos, pero veo que me he equivocado, pues les entraron con todo, pero por un azar del destino, estos habían decidido tomarse unas vacaciones y ese día no se encontraban en sus hogares.
Era tanto el interés de capturarlos vivos para que respondieran ante la justicia, que para no arriesgarse a matarlos, todos los disparos los hicieron al aire, pero los paisanos mal pensados dicen que los hicieron al aire, porque el objetivo era filmar una película como las que acostumbra el gobierno para dormirse a los guatemaltecos.