Escépticos sobre los 101 acuerdos de seguridad y justicia alcanzados por el G-4 y el Gobierno, mantiene la Procuraduría de Derechos Humanos frente a la realidad en Guatemala, donde hubo más de seis mil casos trágicos durante 2009, que se transformó en el año más violento.
Según Sergio Morales, procurador de Derechos Humanos (PDH), a lo interno del G4 -Grupo garante y de acompañamiento del tema seguridad en el país-, han identificado nuevos problemas que demandan atención, sobre los que se darán pormenores este jueves en una conferencia de prensa.
El PDH cuestionó que la violencia generalizada haya sumado asesinatos de mujeres, hechos que se multiplicaron en 2009 sin que las autoridades hayan puesto empeño suficiente para detenerlos, esperando que en 2010 los responsables de la seguridad cumplan el pacto de seguridad y justicia acordado.
La población conocerá sobre los avances y retrocesos identificados por el G4, integrado por la Universidad de San Carlos de Guatemala, Procuraduría de Derechos Humanos, la Iglesia Católica y la Alianza Evangélica.
El magistrado de conciencia apuntó que están preocupados por el escaso avance en los compromisos asumidos por el Estado, a quien corresponde cumplirlos, ya que el Grupo Garante únicamente es de corte moral para señalar y no de obligación de caminar junto a las fuerzas de seguridad para detener la violencia.
Sergio Morales reiteró que no se ha planteado la disolución del G4, por el contrario pidió que los medios de comunicación y la población estén atentos al informe que se dará a conocer, esperando que eso contribuya para que haya un cambio en la política de seguridad ciudadana en el país.