Escenario polí­tico ante un eventual gobierno de UNE


Jorge Fuentes 

Profesor Titular, Escuela de Ciencias Polí­ticas

Universidad de San Carlos de Guatemala» title=»Jorge Fuentes 

Profesor Titular, Escuela de Ciencias Polí­ticas

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<p>En caso la UNE fuera favorecida por el voto ciudadano en segunda vuelta y consiguiera llevar al ingeniero Colom a la Presidencia, la clave de la gobernabilidad para el Ejecutivo estarí­a en el tipo de relación que se establezca con la alianza mayoritaria en el Congreso.</p>
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Se da por sentado que se formará una alianza en virtud de que ninguno de los bloques alcanzó la mayorí­a absoluta. Gana, PP, FRG y PU totalizan el 51% de los votos y podrí­an incorporar a algunos o al resto de partidos de expresión minoritaria cuya representación alcanza un valor cercano al 18%.

Es improbable una alianza legislativa de UNE con Gana, toda vez que Colom no ha logrado concretar relaciones armoniosas con el presidente Berger. Es impensable un acercamiento de Colom en el Ejecutivo con el Partido Patriota por los niveles y matices de rivalidad que han surgido en la campaña presidencial.

El FRG y el Partido Unionista estarí­an mejor aliados en oposición mayoritaria en el Congreso, especialmente el primero si decide concretar su intención de llevar al general Rí­os a la Presidencia del Palacio de la 9ª. avenida.

Gana, Patriota, FRG y Unionista, con el agregado de otros minoritarios de derecha como CASA y UCN se vislumbra como una posible alianza con mayores posibilidades de concretarse. Todos los integrantes, en mayor o menor medida, saldrí­an polí­ticamente beneficiados por la capacidad de maniobra que adquirirí­an.

Recapitulando, la UNE con Colom en el Ejecutivo enfrentarí­a un formato asambleí­sta, es decir, un Legislativo fiscalizador en extremo y en abierta oposición a cualquier iniciativa que surgiera del mentado programa de gobierno que Colom no ha revelado en plenitud.

La agenda de gobierno, que deberí­a arrancar con la prioridad del combate a la pobreza, se verí­a debilitada en su implementación toda vez que desde el Congreso se generarí­an actividades permanentes de oposición a cualquier iniciativa de la Presidencia en cuestiones de generación de polí­ticas públicas, pacto fiscal o programas de desarrollo y descentralización.