Un escaso porcentaje de mujeres que se dedican al trabajo agrícola en las áreas rurales, aproximadamente entre el 1 y el 5 por ciento, tienen acceso a los sistemas de riego, una situación que atenta contra el derecho fundamental de las mujeres de acceder al vital líquido, dijo a Cerigua Lourdes Ortiz, Oficial de Género de la oficina en Guatemala de la FAO.
La responsable de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) destacó que las mujeres rurales son quienes tienen menos acceso la tierra y quienes cuentan con una pequeña parcela para dedicarse a la agricultura a menor escala, es difícil que cuenten con una fuente hídrica o un sistema de miniriego.
La situación es lamentable, ya que las personas deben tener acceso al agua para poder tener una buena alimentación y una buena salud, sin embargo las mujeres continúan con problemas para acarrear al menos una o dos cubetas de agua al día, añadió Ortiz.
El 50 por ciento de la población en el Corredor Seco, que abarca El Progreso, Zacapa, Chiquimula, Jutiapa, Jalapa y parte de Baja Verapaz, aseguró que obtiene el vital líquido de algún río, pozo o quebrada, lo que obliga principalmente a las mujeres a caminar al menos 50 minutos para obtener dos galones de agua.
Son ellas a quienes se les recarga en los hogares la responsabilidad de conseguir agua para preparar los alimentos, para el saneamiento y en algunas ocasiones para los cultivos, un trabajo importante en los procesos de desarrollo social que es ignorado e invisibilizado por la sociedad, aseguró la experta.
En Guatemala, el 17 por ciento de la población femenina se dedica a la agricultura y 5 de cada 100, tiene acceso a una fuente digna de recurso hídrico para sus siembras o a sistemas de miniriego.
Es un gran reto para el país y para sus autoridades abordar el tema de derechos humanos, derechos de las mujeres y la garantía fundamental de acceder a una fuente digna de agua, para asegurar la salud y la alimentación, concluyó Ortiz.
La FAO prepara foros donde se discutirán esas temáticas, en Totonicapán, San Marcos y Quetzaltenango, como parte de las actividades enmarcadas en el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres.