Alta incidencia de niños quemados; hospitales no logran brindar atención a todos los pacientes.
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Cada año, unos 40 mil menores de 14 años sufren quemaduras, de los cuales un 10% requiere hospitalización.
El Hospital General San Juan de Dios atiende aproximadamente cada año 180 pacientes, mientras que el Hospital Roosevelt daría cobertura a unos 150 menores de edad, de los cuatro mil que requerirían atención hospitalaria de urgencia.
Según Lourdes Santizo, coordinadora de la unidad de quemaduras del Roosevelt, pese a que se desconoce detalladamente la cantidad de infantes y adolescentes afectados que no llegan a un hospital, se sabe que la gran mayoría de ellos no tiene acceso a servicios médicos.
La especialista señaló que una de las principales implicaciones para los infantes que no son hospitalizados es la mortalidad, sin embargo, quienes logran sobrevivir porque son curados en sus hogares desarrollan cicatrices deformantes.
En 2008, el Hospital Roosevelt registró una mortalidad del 5% de los hospitalizados.
La mayor cantidad de pacientes que son atendidos en el referido hospital provienen del occidente y de la costa sur del país, aunque no existe una base de datos detallada para afirmar con certeza que éstos son los lugares más afectados.
ALTO RIESGO
Guatemala es el país más poblado de Centroamérica, por lo que se tiene mayor cantidad de infantes y adolescentes quemados. según Santizo, existen mayores probabilidades que un infante sufra de quemaduras como consecuencia de las costumbres, como la quema de juegos pirotécnicos, y las condiciones socioeconómicas.
«Las personas que viven en extrema pobreza, debido a ello sobreviven en hacinamiento y el 48% de personas que vive en el área rural usa candelas, lo cual les hace más vulnerables a los accidentes», aseguró la doctora.
En Guatemala no hay acciones para disminuir el alto porcentaje de pacientes que requieren de atención por quemaduras. De acuerdo con Santizo, esto se debe a que el Ministerio de Salud tiene enfermedades prioritarias por atender como las respiratorias y gastrointestinales que matan más niños que las quemaduras.
El costo que tiene la atención diaria de un paciente en estado crítico alcanzaría los US$200, empero, si el servicio se traslada al intensivo, el costo se elevaría hasta los US$500.
El próximo 20 de marzo, con el apoyo de la Fundación para niños quemados y el patronato del hospital, será inaugurada la Unidad de Quemaduras Pediátricas, en el Hospital Roosevelt, la cual comenzará a funcionar el primero de abril, con una capacidad para 10 camas de quemaduras de leves a mediana complejidad.
Según Santizo, esta es la primera etapa de la unidad, por lo que los casos críticos se continuarán atendiendo en el intensivo de pediatría.