La Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan) señaló que erradicar la desnutrición crónica infantil llevaría unos 30 años, promoviendo la sostenibilidad entre gobiernos de programas como la Ventana de los Mil Días y otras estrategias de protección que involucren al sector empresarial y organismos internacionales.

Mediante la sostenibilidad entre gobiernos, de los programas sociales implementados durante la actual administración, la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional pretende erradicar en su totalidad la prevalencia de la desnutrición crónica en niños y niñas menores de 5 años a nivel nacional para el año 2044.

El jefe de la Sesan, Luis Enrique Monterroso, apostó a las intervenciones de la Ventana de los Mil Días, que incluye servicios básicos de salud, promoción de la lactancia materna, acceso a agua y saneamiento, proyectos de mejoramiento de la economía familiar y la organización comunitaria; así como a otros proyectos, para reducir a cero por ciento, el índice de casos por desnutrición infantil en Guatemala.

Alcanzar esa meta, según Monterroso, implica que la tendencia en la reducción de casos detectados por desnutrición debe mantenerse en 1.7% anualmente, pero para esto hizo un llamado a diversos sectores, entre ellos el empresarial organizado y la cooperación internacional, a unir esfuerzos para erradicar este flagelo en los departamentos más vulnerables al hambre estacional.

“Veinte años sería un tiempo prudencial para marcar impacto en las reducciones y probablemente 30 años serían necesarios para la erradicación total en el país, de la desnutrición crónica”, expresó el funcionario.

A decir del entrevistado, la Ventana de los Mil Días, incluida en el Pacto Hambre Cero desde 2012, es una estrategia “probada científicamente”, que ha tenido éxito en la reducción de la desnutrición infantil en países como Bangladesh, Perú, Brasil o Chile.

Asimismo, aseguró que de no contar con estas acciones definidas para la lucha contra el hambre, problemas como la roya del café y la canícula prolongada anunciada para el segundo semestre de este año, estuvieran “disparando” las cifras de casos detectados por desnutrición.

En ese sentido, hasta la Semana Epidemiológica 18, la Sesan contabilizó 4 mil 985 niños menores de 5 años afectados por hambre este año, mostrando un descenso del 19% comparado con el primer cuatrimestre de 2013; con la particularidad de que  el departamento de Guatemala se ubica a la cabeza de los departamentos con más casos registrados, con 595.

Luis Enrique Monterroso explicó que esto se debe a que se cambió la forma de evaluar los casos en los departamentos, pues antes era por tasa, es decir la cantidad de casos por número de habitantes, pero ahora es solo por el número de casos.