Kuwait, Estados Unidos y otros países donantes han prometido más de 1.200 millones de dólares para ayudar a aliviar el sufrimiento de las víctimas de la guerra civil en Siria.

Las promesas se efectuaron hoy al comienzo de una conferencia internacional, en que funcionarios expresaron esperanzas de que miles de millones de dólares serán destinados a encarar la tragedia en el país árabe.

Millones de sirios se han visto forzados a abandonar sus hogares, y llevar ayuda a los refugiados es sumamente difícil debido a que se encuentran atrapados en medio del fuego cruzado.

La ONU ha pedido 6.500 millones de dólares este año para ayudar a los sirios desamparados, su pedido más abultado para una sola crisis. Los emisarios admiten que probablemente no lograrán recabar toda esa cantidad en Kuwait pero esperan que al menos el encuentro enfoque la atención internacional hacia la crisis.

«El conflicto ha hecho que Siria retroceda años, incluso décadas», declaró el secretario general de la ONU Ban Ki-moon, al inaugurar la conferencia en el lujoso Palacio Bayán de la capital kuwaití.

Ban dijo que la agencias humanitarias «enfrentan demandas sin precedentes» debido a la crisis, y que «es vital compartir la carga».

El emir de Kuwait, jeque Sabá Al Ahmad Al Sabá, inauguró el encuentro con la promesa de enviar 500 millones de dólares, comparado con su promesa inicial de 300 millones hecha el año pasado.

Presionó al Consejo de Seguridad de la ONU a ejercer mayores esfuerzos para poner fin a la crisis, y exhortó a las partes en conflicto en Siria a «colocar el destino de su país y la seguridad de su pueblo por encima de cualquier otra consideración».