El enviado papal a la orden religiosa Legionarios de Cristo, caída en desgracia, se esforzaba por contener el deterioro causado por la renuncia de la directora de la rama femenina y la decisión de 30 miembros de retirarse del movimiento.
En una carta difundida ayer el cardenal Velasio de Paolis instó a los que se retiran que «no traten de persuadir o hacer proselitismo» para que otros los sigan, y confirmó que el éxodo no se limitaba a los miembros de base sino también a directores.
El papa Benedicto XVI encomendó a De Paolis hacerse cargo de la Legión en 2010 después que una investigación del Vaticano determinó que su fundador, el religioso mexicano Marciel Maciel, era un pedófilo y un fraude, que había creado todo un culto en el que los miembros soportaban abuso emocional, espiritual y sicológico.
La revelación fue particularmente escandalosa dado que la Legión era una de las órdenes religiosas de crecimiento más rápido y que Maciel era reverenciado en el Vaticano por su capacidad para atraer miembros y dinero.
De Paolis insistió en que, para sobrevivir, la Legión debía reformarse radicalmente pero desde adentro y se ha abstenido de imponer cambios mayores desde afuera. Pero ha sido criticado por supuestamente moverse con excesiva lentitud, porque la problemática cultura interna de la orden no ha cambiado, y porque los mismos superiores que encubrieron los delitos de Maciel permanecen en posiciones de autoridad.
La semana pasada, Malen Oriol anunció que renunciaba como la influyente directora de las mujeres consagradas de la Legión a cargo de unas 600 laicas que viven como religiosas y trabajan en las escuelas del grupo, reclutando y recaudando para el movimiento laico de la Legión, Regnum Christi.
Oriol también reveló que un grupo de mujeres consagradas había decidido dejar el movimiento y seguir sus vocaciones bajo la autoridad de obispos locales, lo que constituye un golpe para la Legión e insinúa que la desilusión con el proceso reformista de De Paolis aumenta ya que los superiores se resisten a cambiar.
En su carta de renuncia, Oriol afirmó que el Papa había aprobado la decisión, aunque De Paolis pareció desconcertado y preocupado por sus consecuencias. Ya se han retirado más de 400 mujeres consagradas en los tres años desde que la Legión admitió que Maciel abusaba sexualmente de sus seminaristas y que procreó tres hijos.
»Espero que quienes intentan irse de Regnum Christi no cedan a la tentación de tratar de persuadir o hacer proselitismo con quienes se proponen permanecer firmes y perseverar fielmente en sus compromisos», escribió De Paolis. «Al igual que merecen respeto las decisiones adoptadas por quienes se van, el mismo respeto merecen aquellos —la gran mayoría_, que intentan perseverar en la elección que ya hicieron por Regnum Christi».