Para nadie es un secreto que los constantes congestionamientos provocan pérdidas que suman cientos de millones de quetzales para la economí­a del paí­s, pero principalmente para el presupuesto de los guatemaltecos.

El ciclo escolar ha comenzado en algunos colegios, mientras que las escuelas públicas tienen previsto comenzar clases el 29 de enero y es cuando muchos guatemaltecos tendrán que hacer largas colas para llegar a sus labores.

Las autoridades de la Policí­a Municipal de Tránsito (PMT) tienen previsto un incremento en la carga vehicular, donde 100 mil vehí­culos más podrí­an estar circulando dentro de la ciudad capital, por lo que en comparación con el año pasado habrá de 15 a 25 minutos más de congestionamiento en relación con el año pasado.

Entre 2 y 3 kilómetros será el aumento en las colas, al comenzar el ciclo escolar y las rutas principales serán las más afectadas, principalmente las áreas donde el Ministerio de Educación ha aprobado más colegios,

Amí­lcar Montejo, intendente de la PMT, comentó que el tráfico vehicular aumentará en los próximos dí­as, no sólo por el incremento del número de automotores, sino también por la cantidad de centros comerciales y educativos inaugurados recientemente.

Con la temporada escolar, también comienzan a circular los autobuses escolares y se cree que 1,780 comenzarán a salir a las calles. Montejo manifestó que es importante saber cuál es el número de placa del autobús, el nombre del piloto y la ruta que debe tomar.

Para contrarrestar la carga vehicular, habrá 100 policí­as más de Emetra, para hacer un total de 800, entre las recomendaciones que hacen es que será necesario salir con 15 ó 20 minutos de anticipación y realizar una planificación de rutas alternas.

Desde la primera semana de febrero, se cree que se producirá mayor congestionamiento, debido a que se une completamente el gremio de trabajadores de empresas públicas y privadas, así­ como estudiantes de colegios y universidades.

Las arterias con mayor problema podrí­an ser Calzada Raúl Aguilar Batres, los bulevares Liberación y Próceres, la Calzada Roosevelt, Calzada José Milla y Vidaurre, la ruta al Atlántico y la calzada La Paz.

Las autoridades de la PMT dicen que en estos dí­as un 60 por ciento de vehí­culos están circulando, pero el número irá en aumento gradualmente. Otro factor que afecta al tráfico son los percances viales y los hechos de violencia, pues esto no permite la libre circulación de los automotores.

Montejo señaló la importancia de utilizar rutas alternas; por ejemplo, si regularmente frecuenta la calzada Roosevelt, tome en cuenta que también puede hacer uso de las calzadas Mateo Flores y San Juan, pues aunque las últimas dos ví­as son más angostas, es posible que llegue antes de lo previsto a su lugar de trabajo.

TRANSPORTE PESADO

Otro problema que puede afectar el tráfico vehicular puede ser generado por el transporte pesado, pero después de una prohibición se han estipulado horarios para que no puedan circular en horas pico.

Victoriano Zacarí­as de la Central General de Trabajadores de Guatemala (CGTC), quien defiende a los transportistas, señala que por los general tienen muchos problemas por usar horas inadecuadas para circular, se vuelve peligroso y esto les afecta.

Actualmente circulan más de un millón de automotores en la ciudad de Guatemala y cada año se incorporan más, lo cual hace que la ciudad en horas pico sea una trampa sin salida, convirtiendo en una carrera contrarreloj la llegada a tiempo al trabajo o dejar a los niños en la escuela.

El Departamento de Registro Vehicular de la Superintendencia de Administración Tributaria, SAT, reporta que cada año entran al paí­s más de 50 mil automóviles, cifra que supera a la poca capacidad de construcción y planificación de sistemas viales.

Según cifras oficiales, el número de automotores aumenta alrededor de 15 por ciento anual, y el número de calles tan sólo se ha incrementado en 25 por ciento en los últimos 25 años.

En la ciudad transitan más de 3 mil autobuses, los cuales dificultan la fluidez del tránsito. A todo esto se suma el sistema de semaforización y algunos pilotos critican que en muchas esquinas están desincronizados,

TRANSPORTE EXTRAURBANO

El servicio de transporte extraurbano también sufre las consecuencias de las colas y el tráfico denso significa una incidencia en tiempo y costo.

Gamaliel Chin, presidente de la gremial de autobuses extraurbanos de rutas cortas, señala que se manifiesta un aumento del 15 por ciento con el comienzo del ciclo escolar y hacen alrededor de 750 mil viajes a lo largo de un dí­a, en el departamento de Guatemala.

Alrededor de 80 mil pasajeros son los que mueven a lo largo de la semana y por cada hora recorrida en colas, se atrasan aproximadamente 20 minutos y el costo de operaciones aumenta en un 15 por ciento.

En función del gasto por unidad, significa un monto de 50 quetzales adicionales diarios y convertido en galones son alrededor de 3, los necesarios para amortiguar el aumento en el tráfico.

USUARIOS

También los usuarios de los buses sufren de las largas filas, que tienen que soportar dentro de los asientos de los autobuses, y en muchas ocasiones de pie.

Edgar Guerra, presidente de Asociación de Usuarios del Transporte, afirmó que con el tema de gratuidad de la educación, se vio un incremento del 30 por ciento en los usuarios y el bono estudiantil también ayuda al sistema educativo.

En las horas pico circulan millón y medio de usuarios, y se cree que puede aumentar aún más, declaró la asociación de usuarios quien se encarga de revisar la calidad del servicio urbano, donde las constantes violaciones a los usuarios incrementan a diario, por ello se tiene planificado implementar para los primeros meses de febrero el servicio prepago.

GASTOS

De acuerdo con una serie de cálculos hechos por expertos en la materia, un vehí­culo recorre 30 kilómetros promedio por galón de combustible y el rendimiento en medio del congestionamiento disminuye a la mitad.

En cuanto al transporte público se considera que actualmente circulan unos 3 mil autobuses urbanos y 2 mil extraurbanos en la ciudad. Cada unidad gasta un promedio de 25 galones de diésel al dí­a. Esto al año representa 40 millones de galones de combustible.

Según las estimaciones, tanto en el transporte público como en el privado, anualmente se están perdiendo más de 35 millones de galones de combustible por culpa del congestionamiento. Si esa cantidad se multiplica por 23, que es lo que está costando el galón de combustible, da un promedio de 800 millones de quetzales perdidos en un año.

Los estudios detallan que, en promedio, en cada viaje que los guatemaltecos realizan invierten una hora con 20 minutos. Dos viajes que se realicen durante el dí­a, son 2 horas con 40 minutos. Sin embargo, si fuera eficiente el sistema vial las personas harí­an la tercera parte de cada viaje, o sea en 40 minutos.

Esto demuestra que los guatemaltecos, en un estimado, pierden una hora con 20 minutos en trasladarse de sus hogares a sus centros de trabajo cada dí­a. De acuerdo con el estudio, en la ciudad capital un promedio de un millón 500 mil personas se movilizan continuamente por diversas circunstancias. Si el sistema fuera eficiente, a cada guatemalteco se le ahorrarí­a una hora al dí­a en promedio.

Esto quiere decir que en un dí­a se pierden un millón 500 mil horas. En un año aproximadamente, por culpa del tráfico, se están perdiendo 500 millones de horas trabajo.

í‰sta situación le hace daño al paí­s como un todo, pero también a cada uno de los individuos que viajan diariamente a sus puestos de trabajo, perdiendo un tiempo valioso que podrí­an utilizar para obtener más recursos, descansar y/o realizar otro tipo de actividades.

Otros expertos afirman que a esta suma se le tendrí­an que añadir los costos de aceite, mantenimiento, seguros y el costo de oportunidad perdida, que es imposible de calcular.

En suma, La vida en Guatemala, con sus calles y avenidas congestionadas, es un ejercicio diario de mucha paciencia que cuesta mucho dinero.