Los reyes de España, Juan Carlos de Borbón y Sofía, así como dirigentes políticos conservadores y de izquierdas ensalzaron hoy a Manuel Fraga Iribarne como una figura clave de la política nacional.
Fraga falleció ayer en su domicilio de Madrid a causa de una infección respiratoria. Tenía 89 años.
Ministro durante la dictadura de Francisco Franco, fundador del Partido Popular y uno de los padres de la actual Constitución, está considerado como una personalidad esencial de la derecha española.
Los monarcas enviaron un telegrama de condolencia a la familia de Fraga, en el que destacaron su «lealtad a España» y su condición de «gran servidor del Estado».
El presidente del gobierno y líder del PP, Mariano Rajoy, visitó la capilla ardiente del fallecido.
«Todos sentimos mucho la muerte de Manuel Fraga, y ahí está ya en la historia de España, como uno de los grandes del pasado siglo y de este en el que estamos», dijo Rajoy.
Fraga fue ministro de Información y Turismo (1962-1969) durante el régimen franquista. Se le considera el principal impulsor del turismo como industria clave de España.
Con la llegada de la democracia fundó Alianza Popular, que más tarde se transformaría en el Partido Popular. También participó en la redacción de la Constitución, vigente desde 1978.
Entre 1990 y el 2005 presidió el gobierno regional de su Galicia natal.
Los rivales políticos de Fraga también reconocieron el papel jugado por Fraga en la transición a la democracia tras la muerte de Franco en 1975.
«Ha sido un hombre clave para nuestra historia política», dijo el dirigente socialista Alfredo Pérez Rubalcaba. «Me gustaría quedarme con el Fraga padre de la Constitución que nos ha permitido vivir en esta democracia ya sólida y solvente».
El ex presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero también envió un telegrama a la familia, en el que expresó su respeto hacia una persona que ayudó a «la consolidación de la democracia española».
El veterano Santiago Carrillo, dirigente del Partido Comunista en el ocaso del franquismo, consideró que Fraga fue un hombre «muy de derechas y autoritario» en sus inicios, que sin embargo supo adaptarse a los tiempos.
«Fue un hombre de talento con cierta capacidad de adaptarse a los tiempos», manifestó Carrillo, quien cumplirá 97 años el próximo miércoles.
Fraga será enterrado el martes en el municipio gallego de Perbes, donde se encuentra su residencia familiar y solía pasar las vacaciones.