Decenas de enfermeras indias que se habían quedado atrapadas en territorio controlado por islamistas en Irak regresaron hoy al sur de India a bordo de un vuelo especial, según las autoridades.
Las 46 enfermeras llevaban más de una semana refugiadas en Tikrit, una ciudad que ha caído en manos de combatientes del grupo Estado Islámico. Las enfermeras fueron trasladadas a otra zona controlada por la organización extremista, y finalmente cruzaron anoche hasta Irbil, la región kurda iraquí, que funciona con bastante autonomía.
Tras una breve parada para repostar en Mumbai, el avión aterrizó en Kochi, en el estado de Kerala, de donde proceden las enfermeras.
A bordo del avión que salió de Irbil había otros 76 indios, indicó el portavoz del ministerio indio de Exteriores, Syed Akbaruddin.
Tras dejar a las enfermeras, el avión transportaría a los demás a la ciudad sureña de Hyderabad, indicó el portavoz en Twitter.
No estaba claro si las enfermeras habían sido capturadas por los milicianos o sólo se quedaron atrapadas en su territorio. El ministro indio de Exteriores no dio detalles sobre cómo se había conseguido su repatriación.
Según el ministerio de Exteriores, 39 indios trabajadores de la construcción indios secuestrados hace dos semanas aún estaban en poder de los milicianos, pero sanos y salvos.
Hablando el viernes con periodistas, Akbaruddin dijo que cualquier detalle sobre las maniobras diplomáticas realizadas por India para liberar a las enfermeras pondría en peligro la seguridad de los obreros.
Unos 10.000 indios viven y trabajan en Irak, pero sólo un centenar está en zonas violentas o inseguras.
Los trabajadores secuestrados proceden en su mayoría del norte de India, y son empleados de la constructora Tariq Nor al-Huda.