Dos acusados por los atentados islamistas del 11 de marzo de 2004 en Madrid comenzaron este sábado una huelga de hambre con otros nueve presos «también relacionados con el terrorismo islamista», indicaron hoy las instituciones penitenciarias españolas.
Los 11 presos en huelga, todos encarcelados en prisiones de la región de Valencia (este), se declaran «inocentes» y dicen haber empezado este movimiento en señal de protesta contra las «falsas» acusaciones que pesan sobre ellos.
Los dos acusados de los atentados del 11 de marzo son los marroquíes Hassan Al-Haski, uno de los presuntos cerebros de los atentados y presunto jefe en España del Grupo Islámico Combatiente Marroquí (GICM), vinculado a Al Qaeda, y Othman el-Gnaoui, acusado de haber «cooperado» en los atentados, que causaron 191 muertos y 1.841 heridos, indicó una fuente penitenciaria.
El primero puede ser condenado a una pena de 38.952 años de prisión y el segundo, a 38.962 años. La sentencia del proceso, que se celebró entre febrero y julio en Madrid, será anunciada en octubre.
Estas penas son simbólicas, ya que en la práctica, las estancias en la cárcel por terrorismo en España no duran más de 40 años.
Los 11 prisioneros en huelga de hambre son marroquíes y argelinos, según la fuente.
En mayo, en pleno juicio, varios acusados del 11 de marzo, entre ellos Hassan Al-Haski, también mantuvieron una huelga de hambre que duró 10 días.