En el limbo


Estancamiento. Foto de archivo del lí­der norcoreano Kim Jong-Il, en una inspección a sus filas marciales. Las conversaciones sobre el programa nuclear norcoreano se encuentran sin dirección.

La posibilidad de nuevas conversaciones sobre las sanciones financieras estadounidenses contra Corea del Norte parece alejarse, pese a que son clave para frenar las actividades nucleares de Pyongyang, tras varios fracasos en las negociaciones entre los dos paí­ses.


Estados Unidos y Corea del Norte se acusaron mutuamente del fracaso de las discusiones a seis realizadas a fin de diciembre en Pekí­n para disuadir a Pyongyang de su actividad nuclear y de las negociaciones realizadas en forma paralela en Nueva York para resolver la disputa sobre la decisión estadounidense de congelar millones de dólares en cuentas norcoreanas del Banco Delta Asia (BDA).

Expertos financieros de Estados Unidos y Corea del Norte discutieron por primera vez durante dos dí­as sobre cómo resolver la disputa sobre las sanciones contra el BDA, con sede en Macao, al que Washington acusó en 2005 de servir a los norcoreanos para falsificación y lavado de dinero. Pyongyang negó esas acusaciones.

Las negociaciones culminaron empero sin que se registraran avances.

Los funcionarios planean sostener nuevas conversaciones en Nueva York el 22 de enero, pero la portavoz del Tesoro estadounidense, Molly Millerwise, dijo el martes que «no hay una fecha y lugar fijado todaví­a».

Un periódico sudcoreano informó la semana pasada que Corea del Norte habí­a rechazado a Nueva York como lugar para la segunda ronda de conversaciones, tras acusar a los funcionarios del Tesoro estadounidense de no ser serios.

«Estados Unidos todaví­a no ofrece evidencia de que Corea del Norte cometió actividades ilegales», dijo el jefe negociador nuclear de Corea del Norte, Kim Kye-Gwan, citado por el periódico.

«El tema de las sanciones debe ser resuelto primero», agregó Kim.

Estados Unidos puso en la lista negra al banco BDA en setiembre de 2005, diciendo que sospechaba que 24 millones de dólares en cuentas norcoreanas estaban vinculados a falsificaciones o lavado de dinero.

Las cuentas fueron congeladas y otros bancos asiáticos adoptaron medidas similares.

Para protestar por las sanciones estadounidenses, Corea del Norte boicoteó las conversaciones sobre sus actividades nucleares durante más de un año. Luego de realizar su primer ensayo nuclear en octubre, aceptó volver a las negociaciones entre Estados Unidos, las dos Coreas, China, Japón y Rusia con la condición de que el tema bancario fuese «discutido y solucionado».

Un grupo de trabajo de funcionarios financieros de los dos paí­ses fue establecido para que funcione en forma paralela a las conversaciones nucleares.

Ambas partes se han mantenido aferradas a sus creencias: Estados Unidos negándose a levantar las sanciones y Corea del Norte reticente a retornar a la mesa de negociaciones nucleares si las sanciones se mantienen vigentes.

Millerwise no dio indicios de algún plan para levantar las sanciones. La delegación del Tesoro estadounidense se reunió dos veces con los norcoreanos para discutir medidas financieras en un diálogo «cortés y sistemático», dijo.

Agregó que cualquier resolución sobre el tema exigirá un proceso largo.

«Como dijimos en esa ocasión, para que este esfuerzo sea productivo, creemos que será un proceso largo a través del cual dirijamos nuestras preocupaciones subyacentes y las preocupaciones de la comunidad financiera internacional: la conducta ilí­cita de Corea del Norte a estándares reconocidos y normas para operar en el sistema financiero internacional», explicó la portavoz.

La secretaria de Estado norteamericana, Condoleeza Rice, se reunirá con su homólogo surcoreano Song Min-soon el viernes, luego de las crí­ticas del presidente surcoreano Roh Moo-Hyun de que Washington habí­a frustrado las esperanzas de un acuerdo nuclear al imponer las sanciones financieras.

Murió canciller norcoreano

El ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Paek Nam-Sun, falleció, informaron hoy los medios de prensa oficiales.

El dirigente norcoreano Kim Jong-Il envió hoy una corona de flores «expresando sus más sinceras condolencias después de su muerte», según la Agencia Central Coreana de Noticias (KCNA).

Esta fue la primera mención por los medios norcoreanos de la muerte de Paek, que nació en 1929 y era ministro de Relaciones Exteriores desde 1998. No se señalaron la fecha ni las causas de su deceso.