En Edificio Centenario constan los documentos fí­sicos de MiFaPro


A marchas forzadas, trabajadores del centro de documentación de Mi Familia Progresa trabajan, incluso en un dí­a no laboral para el Gobierno. FOTO LA HORA: JOSí‰ OROZCO

Como una oficina oculta, sin letreros ni rótulos que la identifiquen como parte de Mi Familia Progresa (MiFaPro), en la 6ª. calle y 5ª. avenida esquina zona 1, Edificio Centenario, de esta ciudad, frente a las instalaciones del Instituto de Previsión Militar, se localiza la oficina en la que se archivan todos los documentos de los beneficiarios del programa.

Gabriela Rodriguez
grodriguez@lahora.com.gt

Una vez pasadas las primeras puertas, la identificación de la Cohesión Social es visible, pero antes no. FOTO LA HORA: JOSí‰ OROZCOEn la esquina de la 6ª. calle y 5ª. avenida de la zona 1 sólo son visibles las instalaciones de un supermercado. Adentro funciona el centro de documentación. FOTO LA HORA: JOSí‰ OROZCOEl portón de ingreso pide identificación, pero no indica a qué oficina pública corresponde. FOTO LA HORA: JOSí‰ OROZCO

Al mejor estilo de las pelí­culas, el centro de documentación de MiFaPro está «escondido» en medio de locales comerciales y un supermercado. Cuando se pregunta por el centro, los guardias y los trabajadores del inmueble manifiestan desconocer en donde su ubica el mismo.

No obstante, Diario La Hora pudo conocer que en una oficina con pared blanca y puerta café, que se encuentra frente a una oficina administrativa del supermercado que opera en el inmueble, se encuentra el llamado Centro de Documentación del programa, en el cual se almacenan todos los datos de los beneficiarios, especialmente las copias de las cédulas.

Para llegar a tal oficina, los visitantes deben ingresar por el área de locales del Edificio Centenario y subir las gradas de cemento que se encuentran en el vestí­bulo principal; ya en el segundo nivel de dicho inmueble se localiza la puerta café de rejas.

El único letrero que se encuentra en la pared contigua dice: «Las bolsas solidarias y comedores solidarios se trasladaron atrás de Pacific Center», por lo que dicha oficina no se identifica como parte del programa de MiFaPro.

Después de varios intentos, reporteros de este Diario lograron ingresar al centro. Al cruzar la puerta café en mención, se deben subir otras gradas que conducen a un cuarto que antecede al lugar donde se archivan los documentos. Luego se debe caminar por un pasillo que desemboca en el cuarto grande en donde se encuentran todos los trabajadores del lugar.

En él, se logró visualizar una gran cantidad de archivos contiguos a la pared del lugar, almacenados en cajas, además de grandes mesas rectangulares en las que varias personas se dedican a clasificar archivos y papelerí­a. En el momento en que reporteros de este medio ingresaron, realizan las categorizaciones por departamento y municipio de los beneficiarios.

Entre esa papelerí­a, consta aparte de la cédula de vecindad, las constancias de pago a cada beneficiario. Justamente, los documentos que tanto se han solicitado por aquellos que exigen transparencia en el programa.

Mientras los reporteros permanecieron en el lugar, el secreto y la confidencialidad reinó, los susurros de los trabajadores eran frecuentes y hubo quienes hasta preguntaron, cómo se supo del lugar.

En menos de 5 minutos, nuestros reporteros fueron sacados del gran cuarto y llevados a la cocina por el Supervisor del lugar, quien se negó a revelar su nombre y argumentó que no podí­a dar declaraciones. Ofreció llevarnos con quien nos podí­a dar información, pero sólo ingresó a una puerta y éste no volvió a salir; mandó a una asistente para dar el número del vocero de Cohesión Social.

Minutos más tarde, Edgar Rosales, vocero del Consejo de Cohesión Social se comunicó a la redacción de Diario La Hora para ofrecer las explicaciones del caso, sin que este medio lo haya requerido.

En un tono distinto al utilizado el dí­a viernes 19 de febrero, dí­a en el que este medio publicó que los datos de MiFaPro que constaban en Internet no tení­an ni pies ni cabeza, el vocero mencionó que este centro se creó para sistematizar los datos que ya habí­an presentado en la página de Internet.

Agregó que la falta de rotulación se debió al poco espacio que se tení­a en el Edificio Champerico, donde se ubica la sede principal MiFaPro y que se espera que para marzo de este año se presente un nuevo listado de beneficiarios, ya con orden para que no exista cabida a la malversación.

Según Rosales los usuarios del programa han aumentado y por consiguiente se crea este centro para la mejor regulación de los mismos.