Ante la destrucción de instalaciones de una hidroeléctrica en San Mateo Ixtatán y el ataque armado a personeros de una constructora en San Ramón, Barillas, Huehuetenango, el Sector Empresarial Organizado condenó los hechos y exigió a las autoridades competentes hacer respetar el Estado de Derecho en la región y capturar a los responsables.
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Al respecto, el presidente Otto Pérez Molina, afirmó que son grupos que no pertenecen a las comunidades cercanas en donde se instalará una hidroeléctrica en San Mateo Ixtatán, Huehuetenango, los responsables de los disturbios y daños en esa planta.
No obstante, la Cámara de Industria de Guatemala expresó que estos incidentes violentos son el resultado de la presencia de grupos criminales que se han dedicado a intimidar y amenazar a las comunidades, y muestra de la ingobernabilidad es producto de la incapacidad del Estado para cumplir con sus obligaciones constitucionales.
Oscar Emilio Castillo, Vicepresidente de la CIG, agregó: “las autoridades deben redoblar esfuerzos para garantizar el Estado de Derecho, así como la Propiedad Privada y la integridad de los pobladores y trabajadores del área”.
Por su parte, para la Asociación de Generadores con Energía Renovable, la conflictividad social desalienta la inversión en la región, al no existir un plan efectivo para prevenir este tipo de sucesos. Asimismo, la AGER estimó que son 13 proyectos los que están suspendidos debido a esa conflictividad.
Igualmente el presidente de la Cámara de Comercio, Jorge Briz, adicionó que se está mandando un mensaje negativo hacia las inversiones extranjeras interesadas en establecerse en Guatemala y pidió a las autoridades iniciar la investigación que permita procesar a los responsables de los disturbios.
Finalmente, el Procurador de los Derechos Humanos, Jorge de León Duque, indicó que nada justifica los atentados contra la vida y destrucción de la propiedad y que estos delitos deben ser castigados.