Según el reportaje, elaborado por la Agencia Cerigua con el apoyo del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), otro factor importante en la prevención de los embarazos no deseados es el reconocimiento social del problema, ya que sin éste no se emprenderán acciones.

La Asociación Guatemalteca de Mujeres Médicas (AGMM) subrayó la importancia también en el impulso de una atención diferenciada hacia las y los adolescentes en los servicios de salud, donde ellos y ellas se sientan en confianza para preguntar y encontrar respuestas cientí­ficas.

Por su parte, Claudia López, coordinadora de la Unidad de Salud de la Fundación de Mujeres Mayas del Norte (FUNAMYAN) de Alta Verapaz, dijo que la educación en el hogar y en los centros de estudio juega un papel fundamental en la prevención de los embarazos prematuros.

Según López las carteras de educación y salud están haciendo un trabajo importante, pero se deben enfocar mucho más esfuerzos en los padres y madres de familia, para que ellos y ellas estén informadas integralmente y de esta manera puedan orientar a sus hijos e hijas.

La lideresa altaverapacense dijo que otro de los retos es ir erradicando el machismo y las relaciones desiguales entre hombres y mujeres, pues en la mayorí­a de las comunidades son ellos los que toman las decisiones por ellas y son los varones los únicos que se preparan académicamente.

Mirna Montenegro, de la AGMM, subrayó que se debe empoderar a las mujeres de sus derechos, para que ellas puedan decidir cuándo y cuántos hijos quiere tener, así­ como decidir sobre su futuro a qué edad quiere casarse y no ser obligada por los padres y madres de familia.

Finalmente, Montenegro indicó que otro de los retos es la sensibilización a las autoridades e instancias de justicia, para que puedan brindar apoyo y protección a las menores de edad y a sus familias cuando llegan a denunciar agresiones sexuales, pues muchas de ellas deciden mejor no seguir el proceso o no denunciar por temor.