El magisterio nacional tiene que tomar conciencia de que el grandioso acontecimiento histórico de la independencia, al ser motivo de clases en las aulas, tiene que despertar en los alumnos un sentimiento de admiración por los próceres y mártires.
En las antiguas colonias españolas la emancipación fue un movimiento complejo entre los años de 1810 a 1824.
La lucha emancipadora de las trece colonias inglesas y la Revolución Francesa influyeron como causas externas.
A lo largo de tres siglos de dominio español los grupos criollos fueron adquiriendo conciencia de que las colonias representaban formaciones sociales diferentes a la metrópoli. Los criollos, hijos de españoles nacidos en América, consideraron a ésta como su patria, por ello surgieron rivalidades con los peninsulares.
Hubo motivos de descontento: tardanza en la administración de justicia, el pago de tributos por los indígenas del que se pedía la supresión, la esclavitud negra era cuestionada, se solicitaba libertad de comercio, industria y agricultura, existían prácticas de corruptelas y se manifestaba el deseo de lograr la igualdad social.
Los cabildos provenientes de los ayuntamientos prepararon el chispazo inicial revolucionario, alimentado por un sentimiento de rebeldía desde los mismos días de la conquista.
Es importante el legado cultural de la Ilustración y como ejemplo tenemos al monarca Carlos III, quien apoyó el estudio científico mediante expediciones y progresos en la medicina.
España otorgó ayuda militar a los patriotas que lucharon en las trece colonias en contra de Inglaterra, esto fue determinante para muchos criollos.
La época del célebre patriota Francisco de Miranda solicitando apoyo de Inglaterra. La expulsión de los padres jesuitas, quienes eran maestros de una oligarquía de criollos enriquecidos, son otros factores de importancia. Uno de los jesuitas expulsados, Viscardo y Guzmán, lanzó una proclama invitando a la rebelión y a seguir el ejemplo de lucha de los colonos ingleses.
La masonería a la que pertenecieron Miranda, Bolívar y San Martín, jugó un papel revolucionario, tal como se demuestran en los procesos en contra de los próceres.
En 1809 se formaron las primeras Juntas Nacionales en Quito y en Charcas, reprimidas sangrientamente.
Para fines de 1810 estalló la guerra en Nueva España y en Charcas o Cochabamba. Después de Ayacucho en 1824 solamente se mantuvieron los realistas en pequeños lugares en 1826. Enseguida el poder español únicamente continuó en Cuba y Puerto Rico.
Algunos historiadores advierten que hubo tres períodos en la lucha por la libertad, pero ya para 1819 España ante la propagación de la guerra en todas las colonias, además de haber perdido sus barcos de guerra en Trafalgar, se vio obligada a ceder la Florida a Estados Unidos.
Charcas o sea Bolivia se independizó en 1825, desligándose de España, del Perú y de Argentina.
La resistencia española fue prolongada, ello en parte se explica debido a que muchos pueblos demostraron lealtad al rey Fernando VII. Una de las ciudades que luchó militarmente defendiendo al Estado español fue Pasto.
La minoría criolla actuó con tenacidad y perseverancia hasta lograr el triunfo.
En Venezuela la «guerra a muerte» dejó desolados varios territorios. Hubo crueldad en la guerra, con saldo de centenares de miles de muertos como consecuencia de las largas marchas y enfrentamientos.
Algunos héroes como José de San Martín deseaban monarquías para los nuevos países. En 1820 declararon Morillo y Bolívar la humanización de la guerra.
El paso de los Andes por San Martín fue una epopeya militar.
Surgió el caudillismo que aún atrae a gran parte del pueblo. Luego de la emancipación hubo un período de anarquía.
Continuará