Inician proyectos de elaboración de 71 estufas ahorradoras de leña en dos municipios de Santiago Sacatepéquez, que evitaría la tala de árboles en la cuenca del lago de Amatitlán, informaron representantes de la AMSA.
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Con el propósito de evitar la deforestación de la parte alta de la cuenca del lago de Amatitlán, se firmó un convenio interinstitucional con la Municipalidad de Santiago Sacatepéquez y la Autoridad para el Manejo Sustentable de la Cuenca y del Lago de Amátitlán (AMSA) en el que se instalarán 71 estufas ahorradoras de leña como parte de una primera acción que incluyen además otras áreas de ejecución.
De acuerdo a lo informado por el Director de AMSA, José Rodrigo Valladares, con la instalación se pretende evitar que la tala en esta parte de la Cuenca repercuta en todo el área.
El alcalde municipal de Santiago Sacatepéquez, Rolando Coloc Chioc, explicó que el beneficio es directamente para la población; «sin embargo por el impacto positivo en el medio ambiente beneficiamos a la cuenca y por supuesto al país».
«San José Pacul es la beneficiada con el proyecto, mismo que lleva una contrapartida municipal de 25 estufas más para aldea Chichones. En ambas comunidades se sembrarán como parte del compromiso de los vecinos un promedio de 50 árboles por familia beneficiaria, es decir, un total de 3500».
Los proyectos que abarca son: Ordenamiento territorial, educación, reforestación, manejo de desechos sólidos y líquidos y control ambiental. Cada proyecto que se ejecute irá en anexos, el primero es el de estufas ahorradoras.
El convenio de cooperación técnica con la Municipalidad de Santiago Sacatepéquez se suscribió de manera global, para promover el desarrollo del municipio a través de la ejecución de proyectos sustentables, propiciar el acercamiento entre ambas instituciones y frenar la contaminación que el municipio aporta a la cuenca del lago de Amatitlán.
DEFORESTACIí“N
Guatemala es uno de los países donde cada año se pierden 75 hectáreas, ante esto es necesario crear proyectos que minimicen la tala inmoderada de árboles, ya que estos contribuyen a evitar el incremento de los desastres naturales.
REFORESTACIí“N
Organizaciones ambientales inician proyectos para la reforestación en áreas afectadas por la tala de árboles, asimismo AMSA reforestó 175 hectáreas en el Parque Nacional La Cerra, en San Miguel Petapa.
Novecientos treinta y cinco mil quetzales se utilizarán para la fase de recuperación donde se incluye la construcción de barreras vivas con árboles y cercos de piedra, para evitar la erosión del suelo y la pérdida de nutrientes.
Las autoridades señalaron que eso es parte de un programa integral que pretende recuperar y proteger un total de 600 hectáreas y la próxima fase es proteger y reforestar el Parque Nacional Naciones Unidas, entre Villa Nueva y Amatitlán.