De acuerdo con el profesor Luis Fernando Zarceño, instructor del sistema en el Centro de Rehabilitación del Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala, en nuestro país oficialmente, el Braille se viene implementando formalmente desde 1945. Coincide con el año en que se fundo dicha entidad.
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Zarceño comenta que el sistema de enseñanza depende de la edad del aprendiz. Si se trata de niños, es relativamente más fácil, es como enseñarle a escribir y leer a un niño vidente, explica.
El entrevistado refiere que a los infantes ciegos se les instruye en el Centro Santa Lucía para Niños Ciegos. Allí se ofrece el nivel de párvulos en adelante. El objetivo, dice Zarceño es que luego puedan integrarse a una escuela normal para realizar sus estudios académicos como cualquier niño.
En el caso de las personas desde los 15 a los 55 años, funciona el Centro de Rehabilitación Integral. Es dirigido a personas que han perdido la vista por varias rezones. Se trata de otro ambiente, explica el profesor, pues allí se debe manejar con sutileza el aspecto emocional. Hay personas que vienen dispuestas a aprender, lo cual facilita la enseñanza. Quienes muestran interés pueden llegar a dominar el Braille en un mes, indicó. Pero comenta que muchos llegan temerosos por el sistema que se convierte en algo nuevo.
Hay casos complejos como las personas que pierden la vista por diabetes, dice Zarceño, pues el tacto tiene menos fuerza que un no vidente común.
Este profesor que lleva 20 años formando a ciegos, explica que hoy en día todavía no existen escuelas en Guatemala para capacitar a los instructores de Braille.
Y pese a que ya existen muchos libros en sistema Braille, aquí en nuestro país hay pocos ejemplares, «hay un poco de todo, algunas biblias y otros de literatura como El Señor Presidente», dice el profesor y agregó que tienen la esperanza de que se impriman mas libros pues desde hace 5 años que en Guatemala se maneja la impresión Braille.