EL SIMBOLISMO TRADICIONAL DEL MIERCOLES DE CENIZA


Introducción A pesar que las celebraciones de la Semana Santa en Guatemala tienen tanta importancia, y que por su naturaleza y significación se han convertido en viva expresión de la idiosincrasia de los guatemaltecos de los distintos grupos étnicos y socioculturales que habitan Guatemala, los estudios históricos e interpretativos aún no se han realizado. íšnicamente someras descripciones etnográficas que pecan de grande superficialidad. Por tanto, estos apuntes que publicaremos, trataran en lo posible de ilustrar al lector del Diario La Hora sobre la historia y orí­genes del Miércoles de Ceniza, la Cuaresma, los antecedentes inmediatos a la conmemoración de la Semana Santa en Guatemala.

Celso A. Lara Figueroa
Del Collegium Musicum de Caracas, Venezuela

En torno al Miércoles de Ceniza Es el lapso de cuarenta dí­as que comienza a contarse a partir del miércoles siguiente al Martes de Carnaval. Para los católicos ese perí­odo es ocasión para el ayuno y la penitencia, tiempo de austeridad y vigilia. Es una fecha móvil en el calendario. Este 2010 es el miércoles 17 de Febrero.

El primer dí­a de la Cuaresma es llamado Miércoles de Ceniza por la práctica vigente desde el siglo IV, de colocar cenizas sobre la cabeza de los penitentes que acuden a los templos para realizar ceremonias de expiación por los excesos cometidos durante el Carnaval. Antiguamente se rociaban cenizas sobre las cabezas de los fieles que, trajeados con hábitos de penitencia, debí­an acudir a los templos en esta fecha. Actualmente sólo se traza una cruz con ceniza sobre la frente de los cristianos que voluntariamente acuden al templo. Las cenizas para llevar a cabo esta práctica, se obtienen de la incineración de las palmas benditas, repartidas el Domingo de Ramos del año anterior que son conservadas para este propósito. Son sí­mbolo de penitencia y de la brevedad de la existencia terrenal para los católicos y con su aplicación sobre la frente se recuerda el texto del Génesis «Polvo eres y en polvo te convertirás». Antiguamente las observancias de la Cuaresma eran bastante rí­gidas en lo relacionado con el ayuno y la abstinencia, que debí­an ser cumplidos estrictamente ya que durante el perí­odo se recuerdan los cuarenta dí­as de ayuno y meditación que pasó Jesús en el desierto. Sólo permití­a una comida al dí­a en la cual no se consumí­an carnes, huevos o pescado. Esto quizás podrí­a explicar los excesos en el perí­odo anterior -el Carnaval- en conocimiento de las caracterí­sticas de austeridad que tendrí­a el tiempo que le sucederí­a. Paulatinamente la Iglesia ha ido modificando sus mandatos y se permitió el consumo de carnes de aves y pescado, más no de carnes rojas. Actualmente los cristianos se someten a abstinencia de carne solo los dí­as viernes de la temporada de Cuaresma, la cual sustituyen por pescado o carne de aves. El quinto Domingo de Cuaresma para la Iglesia ya es el comienzo del ciclo de Pasión. Son cubiertos los altares e imágenes sagradas en los templos con lienzos de tonos violeta, color litúrgico sí­mbolo de arrepentimiento y la penitencia usado también en tiempo de Adviento. El Carnaval desde la antigí¼edad se caracterizó por una serie de festejos desenfrenados cuya duración y lí­mites a través de la historia han variado según las costumbres locales. Indica Julio Caro Baroja, notable investigador español, que en textos importantes del siglo XVII el perí­odo comprendido entre el primer dí­a del año y el Miércoles de Ceniza, primer dí­a de Cuaresma, era el apropiado para utilizar de manera lí­cita las máscaras y salir con ellas a las calles. Según este autor en las calendas de enero, cortejos o grupos de personas enmascaradas se veí­an por los pueblos y campos de diversos paí­ses de Europa con disfraces variados. Entre los más comunes estaban los de hombres trajeados de mujer y los de viejos y viejas; que en su recorrido realizaban representaciones teatrales, a pesar de haber sido condenada por la Iglesia esta «costumbre pagana» desde el siglo IV, pero se trataba de un hábito muy antiguo difí­cil de erradicar. La usanza de realizar el entierro simbólico del Carnaval el Miércoles de Ceniza es una costumbre muy difundida en paí­ses europeos y americanos. Nueva Guatemala de la Asunción, Miércoles de Ceniza, 17 de febrero de 2010