El costo de la reconstrucción de Guatemala por los daños causados por el volcán Pacaya y la tormenta tropical Agatha a finales de mayo y principios de junio pasados y los planes de prevención requieren una inversión de mil 125 millones de dólares, según el presidente ílvaro Colom.
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El gobernante, en declaraciones que publica hoy en la prensa local, dijo que sólo para los programas de prevención se necesitan mil 200 millones de quetzales (150 millones de dólares).
Una misión de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo, que evaluó los daños causados por la violenta erupción del Pacaya y el ciclón, dijo la semana pasada que la reconstrucción tendría un costo de 7 mil 800 millones de quetzales (975 millones de dólares).
Sin embargo, el jefe de Estado señala que la reconstrucción que desea su gobierno costará más que esa cifra debido a que hay que agregar los programas de prevención para evitar más daños en el futuro.
De acuerdo con la evaluación de la misión internacional, la mayor cantidad de daños provocados por los desastres se concentró en la infraestructura de transporte, cultivos agrícolas y medio ambiente.
Sólo en el medio ambiente, las pérdidas fueron cuantificadas en mil 790 millones de quetzales (224 millones de dólares).
Los fenómenos naturales, según el informe, ocasionaron un 36 por ciento de daños en la infraestructura del país, 31 por ciento en el medio ambiente, 20 por ciento en materia social, y 13 por ciento en las ramas productivas.
La violenta erupción del Pacaya, el pasado 28 de mayo, dejó dos muertos y miles de damnificados en cuatro departamentos del país que fueron cubiertos por toneladas de arena volcánica lanzada desde su cráter.
En tanto que Agatha se cobró la vida de 174 personas, dejó un centenar de desaparecidos y cientos de miles de damnificados.
Las pérdidas provocadas por la tormenta Agatha en los sectores agrícola, pecuario, hidrobiológico e infraestructura de riego en Guatemala ascienden a 47 millones de dólares, cifra que podría incrementarse ante el pronóstico de más lluvias por causa del fenómeno de La Niña.
La tormenta tropical Agatha, a fines de mayo, dejó en el país 174 muertos, 113 desaparecidos y medio millón de damnificados, según un recuento oficial.
Un informe del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, al que tuvo acceso la AFP, da cuenta que se perdieron 38.313 hectáreas de cultivos, con un valor de 40,7 millones de dólares.
De acuerdo con el informe, que el Ministerio presentó ante el Congreso esta semana, entre los cultivos más afectados figuran el maíz, el plátano, la sandía, el café, el tomate, la papaya y el limón.
En infraestructura para riego se registraron pérdidas por 4,5 millones de dólares, según el documento.
Además, los sectores pecuario e hidrobiológico (criaderos de especies acuáticas) reportaron pérdidas por un millón de dólares cada uno.
El ministro de Agricultura, Juan Alfonso De León, explicó que hubo 68.827 familias damnificadas por la tormenta tropical.
Por su parte, un equipo técnico de organismos multilaterales que evaluó los daños ocasionados por Agatha en el país estimó las pérdidas en 982 millones de dólares, fondos con los que no cuenta el Gobierno.
Además, los guatemaltecos enfrentan la amenaza de un «copioso» invierno que pronostican los meteorólogos entre agosto y noviembre, debido al fenómeno de La Niña en el océano Pacífico.
El director del Servicio de Meteorología, Eddy Sánchez, dijo que La Niña estará presente a finales de agosto o principio de septiembre, con un descenso en la temperatura de las aguas del Pacífico.
Al enfriarse el agua en el Pacífico se fortalecerá la posibilidad de que se formen huracanes en este océano y en el Caribe, explicó.
Según el experto, el fenómeno El Niño presente desde 2009 ahora está finalizando, luego de haber causado sequías en Centroamérica, dañando muchos cultivos en Guatemala.
Tras el paso de Agatha, el país se ha visto afectado por constantes lluvias, que han provocado inundaciones y daños en diferentes áreas, así como incrementos periódicos en los niveles de oleaje en las costas del Pacífico y Caribe, en perjuicio de los pescadores artesanales.
Este fin de semana no será la excepción, pues la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres alertó que habrá marejadas en el Pacífico, y que las olas podrían alcanzar unos dos metros de altura.
La reconstrucción es hoy el asunto prioritario que aborda el gobierno de Guatemala como parte del diálogo nacional en desarrollo. Así cierra la semana, al retomar el Ejecutivo primero con el empresariado y después con el Congreso, en éste con los jefes de bloques, las pláticas interrumpidas semanas atrás por los desastres dejados por dos fenómenos naturales.
El presidente ílvaro Colom fue particularmente activo en un encuentro con el sector privado en la mesa de trabajo correspondiente a la gobernabilidad, sin obviar el tema de la recuperación.
Colom invitó entonces a sus interlocutores a aportar conocimientos técnicos y de capacitación a las tareas de reconstrucción con transformación, necesarias dados los daños ocasionados por la erupción del volcán de Pacaya y la tormenta Agatha.
Escuchó entonces propuestas sobre varios asuntos planteados por los integrantes del poderoso Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras.
Después correspondió el turno a la reunión con los parlamentarios, cuyos dirigentes aseguran estar a la espera de las iniciativas del Ejecutivo.
Desconfiados como siempre, los diputados de las bancadas opositores estuvieron de acuerdo en crear una comisión que afine los detalles de la reconstrucción, pero con la condición de velar por la transparencia en la ejecución de las construcciones.
Cuatro mesas de trabajo son promovidas desde enero pasado, cuando Colom anunció su interés de llevar a cabo un proceso de diálogo nacional con todos los sectores.