¿Cuál será el rezago educativo proporcional al número de ciudadanos guatemaltecos? ¿Cuáles son los municipios que tienen mayor incidencia en rezago educativo y analfabetismo? ¿En qué parte del país se presenta más acentuada esta problemática? ¿Siguen siendo las comunidades indígenas las que sufren esta falta de cobertura educativa gubernamental?
Es obvio que el Ministerio de Educación y sus dependencias específicas tiene que redoblar el trabajo en cuanto a erradicar el analfabetismo y atraso escolar con los medios que tenga a su disposición (Conalfa, Telesecundaria, Iger, Educación de adultos, Escuelas Nocturnas y otros)
El rezago educativo debe interpretarse como la falta de una política educativa nacional, deficiencias formativas en el sector docente de los niveles preprimario, primario y secundario en el sector oficial como en el privado; falta de instalaciones adecuadas, la formación sin calidad y la absoluta carencia de voluntad política de las autoridades educativas de turno para resolver este problema.
Dentro de la verdadera reforma que necesita el sistema educativo en Guatemala, está el modificar algunos conceptos y acciones que se reproducen de manera automática; tal como el concepto de analfabetismo, pues el objetivo no se circunscribe nada más a saber escribir el nombre y la firma; el objetivo real es que el educando sepa interpretar lo que se escribe o se lee, de lo contrario sólo se automatiza la necesidad de las personas.
¿A quiénes alcanza el rezago educativo? Pues a un sinfín de personas de todas las edades y estratos económicos y sociales; incluyendo profesionales de todas las disciplinas científicas; éste se manifiesta en el comportamiento de toda aquella persona que no entiende lo que lee y por lo tanto reacciona con lo que su lógica común le indica, aunque sea en contraposición a la ley.
Erradicarlo es de beneficio social, pues así dejará de utilizar la automatización de las personas y se le dará uso a la razón interpretando la realidad de lo que se lee o escribe; por supuesto, ese es un objetivo que el Ministerio de Educación debe trazarse y cumplir.
De no ser así, seguiremos viviendo con funcionarios y empleados, comerciantes, transportistas, profesionales y personas que saben leer y escribir, pero… que siguen sin entender lo que leen o escriben. ¿Es este criterio el que el estrato económico dominante desea perpetuar en los educandos guatemaltecos para que no asuman su función de interpretar y comprender la realidad de su vida?
¿Por qué tanta injerencia del sector económico poderoso en el sistema educativo guatemalteco? ¿Por qué los ministros de Educación velan para que el sistema siga igual y que todo cambie para que nada cambie?
¡Feliz día del Maestro! Esa cantaleta es otra farsa más del Ministerio de Educación al desear feliz día a los maestros, cuando ni siquiera los provee de insumos mínimos para cumplir con su labor docente y les exige aprobar a la población escolar sin importarle su aprendizaje. El Mineduc quiere estadísticas positivas para justificar presupuesto y préstamos, que al final… ¿A las manos de quienes van a parar?