El Papa rendirá homenaje al Santo Sudario de Turí­n


El Papa Benedicto XVI llega a San Pedro para su audiencia semanal. AFP PHOTO / ALBERTO Pizzoli

El papa Benedicto XVI rendirá homenaje el domingo al misterioso Santo Sudario de Turí­n, el lienzo que habrí­a envuelto el cuerpo de Cristo tras su crucifixión y que es objeto tanto de veneración como de controversia.


La enigmática tela de lino está siendo exhibida al público desde el pasado 10 abril en la catedral de Turí­n, al norte de Italia, lo que ha suscitado el interés de miles de personas provenientes de todo del mundo que quieren admirar la tela que para muchos describe la pasión de Cristo.

Se calcula que más de dos millones de visitantes habrán desfilado ante la reliquia, la cual permanecerá expuesta al público hasta el próximo 23 de mayo. Se trata de la «primera ostensión del tercer milenio», aunque el Santo Sudario fue expuesto por última vez en el año 2000, con ocasión del Jubileo.

La llamada Sindone fue sometida además en el 2002 a un importante trabajo de conservación y restauración, por lo que los visitantes, curiosos y turistas han podido admirarla en mejores condiciones tras el cristal blindado.

Al anunciar en junio de 2008 que el Santo Sudario serí­a expuesto de nuevo, el Papa declaró que constituí­a «una ocasión propicia para contemplar este rostro misterioso que habla silenciosamente al corazón de los hombres, invitándolos a reconocer el rostro de Dios».

Durante su peregrinación del domingo, el pontí­fice alemán, de 83 años, tiene programado varios actos: una misa al aire libre frente a la catedral, un encuentro con los jóvenes y una visita a un centro para minusválidos.

La visita se celebra en un momento delicado para Benedicto XVI, salpicado por una ola de escándalos por haber encubierto por décadas a los curas pedófilos de Estados Unidos y Europa.

Pese a ello, la visita del Papa atraerá a las multitudes, tal como ocurrió en el 2000, cuando miles de peregrinos recibieron a Juan Pablo II.

La reliquia es una pieza de lino de 4,36 m de largo por 1,10 m de ancho en la que, según la tradición, quedó grabada la imagen del cuerpo de Cristo con las marcas de la crucifixión y sobre todo de su rostro.

La tela fue hallada a mediados del siglo XIV cerca de Troyes (Francia) y desde entonces el tejido ha dado pie a una batalla entre los cientí­ficos escépticos y los que creen en su autenticidad.

El lienzo fue donado en 1983 a la Santa Sede por la dinastí­a real italiana de los Saboya, que la habí­a adquirido hace más de 5 siglos.

Los historiadores que se basan en la datación por el método del carbono 14 realizada en 1988 aseguran que el lienzo fue fabricado en la Edad Media, entre 1260 y 1390, época en que se comercializaba con frecuencia con todo tipo de reliquias.

Pero esa evidencia tampoco es segura. En 2005, la revista francesa Science et Vie (Ciencia y Vida) hizo confeccionar un falso sudario con las técnicas medievales.

El Vaticano no se ha pronunciado nunca sobre su autenticidad, aunque la visita el domingo de Benedicto XVI, así­ como las dos realizadas por su predecesor, Juan Pablo II, representan un reconocimiento religioso a lo que se considera la mortaja de Jesús.

El mismo Juan Pablo II, durante la exhibición de 1998, definió el misterioso lino como «una provocación a la inteligencia», y un «espejo del Evangelio».

LEGIONARIOS DE CRISTO Visita al Papa


El papa Benedicto XVI recibió hoy en el Vaticano a los cinco obispos que efectuaron una inspección a la controvertida congregación mexicana Legionarios de Cristo, cuyo fundador, el fallecido padre Marcial Maciel, abusó por décadas de seminaristas jóvenes, indicó hoy la Santa Sede.

El encuentro con el Papa no habí­a sido anunciado y demuestra la importancia que el Pontí­fice concede al caso.

Benedicto XVI deberá decidir sobre el futuro de la congregación mexicana una vez evaluados los informes presentados por los obispos.

Las decisiones sobre la congregación «serán adoptadas en un segundo momento por el Santo Padre, tras un cuidadoso estudio y reflexiones sobre los resultados de la visita apostólica», o inspección, adelantó el miércoles padre Federico Lombardi a la emisora Radio Vaticano.

Los cinco obispos son Ricardo Watty Urquidi, obispo de Tepic (México), Charles Joseph Chaput, de Denver (Estados Unidos), Giuseppe Versaldi, de Alessandria (Italia), Ricardo Ezzati Andrello, de Concepción (Chile), Ricardo Blázquez Pérez, de Bilbao (España).

Los cinco obispos visitaron más de 120 comunidades legionarias para entrevistarse con sacerdotes y religiosos.

Tras el informe, no se excluye que el papa Benedicto XVI termine por designar «un comisario» para dirigir la congregación o que destituya a toda la cúpula de la Legión, como lo solicita Jason Berry, coautor de un libro y un documental («Vows of Silence»), quien investigó por años a la influyente congregación.

La congregación mexicana reconoció a finales de marzo pasado por primera vez los abusos sexuales cometidos por su fundador y pidió «perdón» a las ví­ctimas.

Antes de morir en enero de 2008, a los 87 años, Maciel tuvo que dejar de oficiar en público y llevar una vida retirada de penitencia y oración por orden del actual Papa, aunque muchos miembros de la congregación siguieron respaldándolo.