En épocas pretéritas se le decía a febrero el mes de los cuadritos, porque después de las fiestas de fin de año, llegaban los gastos de colegiatura y otros inherentes a la canasta básica, y las gentes a pesar de que no estaba tan acrecentado el consumismo, como ahora, si existía la costumbre del intercambio de regalos, sin el colorido papel, que como dijo alguien, sólo sirve para hacer basura.
Ese mes, febrero, las gentes se las veían a ?palitos?, porque entonces el ciclo lectivo se iniciaba en marzo, que como se ha dicho en otras ocasiones el dictador Ubico lo cambió para que todos celebráramos su cumpleaños, el diez de noviembre, ¿quien iba a decir que no?
Pues resulta que ahora se gasta mucho para Nochebuena, que es tal para el comercio, tanto formal como informal, pues el corte de caja del cierre de año acusa abundantes ganancias, en tanto que, los bolsillos de los medio pobres y de los pobres enteros, que están quebrados, acusan déficit, al cual contribuye gabonalmente el recibo de la corriente eléctrica.
En la E.E. se maneja el criterio de que todos los ciudadanos consumen mayor cantidad de energía, como si le dieran corriente desde la 10ª avenida, por el Campo de Marte, a toda la iluminación de la Avenida de la Reforma hasta el gran árbol de pino de cerca del Obelisco, no importa que la casa esté desocupada, el recibo llega supercargado, y si se reclama dicen que la computadora no se equivoca. Es cierto, pero el ingreso de los datos sí.
De manera que no queda más que hacerle frente a enero, tratando de que los ?cuadritos? no abunden. ¡Ah!, sería de esperarse que la lista de la cantidad de útiles escolares de este año no sea tan kilométrica, no vaya a resultar más de algún alumno con problemas en la columna vertebral por andar cargando con semejante peso, que le ha costado muchos pesos a los papás.
ítem Más: estoy de plácemes porque tengo la misma edad que La Hora, por eso me dicen: ?Tony Walker?.