Recién terminada la Primera Guerra Mundial, el paseo marítimo de Atlantic City, Nueva Jersey, es un imperio de entretenimiento y corrupción. La costa llena de lujosos hoteles y famosos locales nocturnos al estilo Broadway, es la meca del tráfico ilícito de bebidas alcohólicas controlado por Enoch «Nucky» Thompson, quien usa su poder para ejercer su respetado rol como político en el día y su temido papel de gángster en la noche.