El IX Festival Internacional de Cultura Paiz, se está realizando actualmente en Antigua Guatemala. La realización de espectáculos nacionales como internacionales de gran calidad, motiva a todos aquellos amantes de las artes a que asistan al mismo a presenciar eventos que van desde la danza, el teatro, la música hasta la literatura.

íngel Arturo González es uno de los principales promotores de tan magno evento que ya va por su noveno festival. Le realizamos una entrevista donde nos expresó sus vivencias en el Festival, de su sentir como antigí¼eño, sobre el desarrollo cultural del paí­s y también sobre la celebración de la Semana Santa en Antigua que será tema para otra entrevista más adelante.

1. Estamos celebrando ya el IX Festival Internacional de Cultura Paiz ¿Cómo fueron los inicios?

Las condiciones sociales del paí­s eran sumamente delicadas y peligrosas. Nos encontrábamos en pleno conflicto armado interno y la población se encontraba prácticamente ausente de los escenarios culturales. La inseguridad y el temor a la barbarie de esos dí­as tení­a a los guatemaltecos confinados en sus casas luego de sus ocupaciones diarias. Se habí­a desarticulado la relación público-eventos culturales y se habí­a afectado notablemente la libre expresión artí­stica. No habí­a condiciones para el vuelo de la creación. De ahí­ que padeciéramos un marcado desaliento en la producción cultural de gran proyección y trascendencia. El Festival surgió con un gran acopio de fe, de esfuerzo y de esperanza por reconstituir los hechos culturales en sus posibilidades formativas, informativas y recreativas. De 1991 a la fecha nos sentimos satisfechos de haber cumplido nuestros objetivos a cabalidad: contribuir efectivamente en el desarrollo cultural de Guatemala, y propiciar el intercambio cultural internacional.

2. El Festival ocupa un espacio muy importante para las artes y la cultura guatemalteca, según se dice en el mundo intelectual, es un icono cultural. ¿Cómo se organiza el movimiento para seleccionar artistas de alta calidad? Al principio fue muy difí­cil, tomando en cuenta las condiciones anteriormente expuestas. La situación era muy delicada, al punto que nuestro paí­s resultaba un destino inhóspito para la visita de exponentes culturales internacionales. Hay que recordar que eran tiempos en los que habí­a un apercibimiento internacional para viajar a Guatemala, a riesgo de padecer las consecuencias de la violencia armada y la criminalidad. El trabajo de gestión era muy difí­cil. Sin embargo, la fe en Guatemala, el prestigio de la Fundación Paiz y el deseo de muchos paí­ses de participar solidariamente en la recuperación del estado pací­fico en nuestra Patria, hizo que siempre hubiera manifestaciones de apoyo y de irrestricto deseo de grupos artí­sticos por estar presentes en el Festival. Hoy por hoy la situación es diametralmente diferente. Ahora nuestro problema es seleccionar entre lo mejor de las numerosas propuestas que recibimos. Pasado un Festival comienzan a llegar las propuestas y eso nos permite tener más tiempo y comodidad para sopesarlas.

3. Al elegir Antigua Guatemala para su celebración deja un toque muy especial que enaltece el espí­ritu de todos aquellos que amamos la cultura. ¿Cómo nace esa idea de realizarlo en esa ciudad colonial? Nosotros reconocemos el significado histórico de Santiago de Guatemala, hoy Antigua Guatemala. Y no exagero, si confieso que me siento muy orgulloso de ser antigí¼eño. De manera que no sólo por cuestiones logí­sticas nos resulta práctico hacer el Festival fuera de la dinámica de la Ciudad Capital, sino porque participamos del destino cultural de Antigua Guatemala, de su destino histórico como epicentro del desarrollo cultural en el ámbito mesoamericano. Por otra parte, los escenarios naturales que brindan sus monumentos arquitectónicos en ruinas, conceden una particularidad a los espectáculos que ahí­ se ofrecen, concediendo toda la magia, toda la poesí­a comparable a grandes y prestigiados escenarios del mundo. Para nada, por ejemplo, tenemos que envidiar las Termas de Caracalla, en Roma, comparándolas con la imponente Ermita de la Santa Cruz. Por eso encanta a los artistas y desean volver.

4. ¿Cómo es íngel Arturo González en el escenario cultural? Bueno…, soy un antigí¼eño que trabaja en la que menciono como la actual Capital, consciente como estoy de lo que mi ilustre ciudad natal ha significado durante más de cuatrocientos cincuenta años. Cuando alguien me pregunta acerca de mi vocación y mi dedicación plena al desarrollo cultural de Guatemala, confieso con franqueza que no tengo idea qué conjunción genética o astral tuvo que ver con mi destino, pero sí­ estoy seguro que es resultado de la impronta de Antigua Guatemala en mi espí­ritu. Cómo no ver el mundo de otra manera si desde niño he podido contemplar la grandeza del ser humano hecho obra de arte magní­fica en la arquitectura, en las letras, en la música y tantas otras expresiones que han hecho que Antigua Guatemala haya llegado a ser merecedora por parte de la UNESCO del reconocimiento como Patrimonio Cultural de la Humanidad. La cultura y mi vida cotidiana son indisolubles. Una se debe a la otra.