El euro batió hoy un nuevo récord desde su creación con respecto al yen, a más de 160 yenes, mientras siguen proliferando las operaciones de «carry trade» estimuladas por las bajas tasas de interés en Japón.
El euro llegó a cotizar en sesión a 160,04 yenes, el mismo día en que el Banco central de Japón (BoJ) decidía mantener su principal tasa de interés sin cambios, a 0,50%.
La moneda única europea está apoyada por la orientación al alza de las tasas de interés en la zona euro. El mercado apuesta por tasas a 4% para fines del segundo trimestre (hoy 3,75%), y algunos analistas piensan que no se tratará del último ajuste monetario en este ciclo, pudiendo llegar a 4,25 ó 4,50%.
En cambio, en Japón las tasas de interés son muy bajas, a 0,50%, lo que alienta a los inversores a practicar el «carry trade», una técnica especulativa que se beneficia de la diferencia de los tipos de interés entre ambas economías.
Esa operación consiste en tomar prestado en yenes, a muy bajo interés, y cambiarlos por divisas de regiones donde las tasas de interés son mucho mas elevadas, como Estados Unidos o la zona euro.
Al optar el martes por el statu quo, el BoJ destacó que la evolución de los precios al consumo en Japón podría encontrarse «cerca de cero» a corto plazo, lo que podría significar que las tasas no serán modificadas antes del verano boreal.
Según Paul Chertkow, economista del Bank of Tokyo-MUFJ, el statu quo monetario en Japón debería prolongarse al menos hasta julio, con el consiguiente debilitamiento progresivo del yen.
«De aquí a tres meses, auguramos un euro a 164,56 yenes, y un dólar a 121 yenes», pronosticó.
«Mientras los operadores no sean advertidos contra (el riesgo de) el carry trade, y lo perciban como una operación sin riesgo y en sentido único, el yen seguirá a la defensiva», explicó por su lado Gavin Friend, economista de la Commerzbank.
A principios de febrero, en Essen (Alemania), varios responsables del G7-Finanzas habían sin embargo advertido a los mercados financieros sobre los riesgos que acarrean estas operaciones en sentido único, en particular contra el yen.
Esta advertencia no parece haber surtido efecto.
El franco suizo también es otra víctima del carry trade. La tasa de interés promedio del Banco central suizo es de 2,25%, un rendimiento relativamente bajo que expone al franco helvético. Así, el euro llegó el martes a 1,6391 francos, también un máximo histórico.