El dilema de los principios en la elección de un candidato


Es sumamente complicado tener que escoger (porque nuestro sistema no permite elegir, elegir es otro tema de que hablar) entre los candidatos que ahora se ciernen en la contienda electoral. Es difí­cil poder conciliar los principios de uno con las ideologí­as y principios de otros, uno se identifica con un candidato sobre determinados principios, pero al entrar a debatir otros principios ya no coinciden. Así­ podemos analizar a cada uno de los candidatos y ninguno concuerda.

Ismael Gómez Sánchez / O-16, 54132

 


En mi caso, se me ha complicado hoy en dí­a, no así­ mucho tiempo atrás, cuando no entendí­a mucho sobre los principios de nuestra sociedad y cuando tampoco me importaba mucho mi gente, es así­ como he considerado algunos de mis principios para poder analizar cada uno de ellos o por lo menos de forma somera determinadas ideologí­as.
 
Cuando considero el tema de desarrollo económico, pienso en qué opciones de derecha, derecha progresista o centro no serí­an opciones malas, sin estimar aún otros temas sensibles para algunas personas. Los gobiernos socialistas suelen tomar opciones de endeudamiento con la situación ya conocida en Europa socialista.
Cuando considero el tema de valores de nuestra sociedad tengo que pensar en opciones bastante conservadoras también. Los gobiernos socialistas se les ha caí­do la familia.
Cuando pienso en el derecho a una vida digna, el derecho a la salud, derecho a la alimentación pienso entonces en las opciones de centro izquierda o izquierda. Los gobiernos derechistas o conservadores tienden más a destruir esos derechos, y valoran más los ingresos del paí­s o los beneficios de empresas grandes sobre la salud y el derecho a alimentación y ambiente sano.
Cuando pienso en la eliminación de privilegios de empresas sobre el derecho de la población, entonces pienso, también, en opciones de centro izquierda o izquierda. Los gobiernos de derecha proveen más privilegios a empresas, aunque en Guatemala hemos visto con desagrado que izquierda o derecha han beneficiado a las empresas.
Ahora bien, cuando pienso en temas tan sensibles para la sociedad como lo son el aborto y la homosexualidad o los derechos sexuales y reproductivos pienso en que las opciones de derecha o centro derecha podrí­an ser mejores opciones.
Cuando llego al tema de minerí­a, hidroeléctricas y temas de derecho consuetudinario y derechos de los pueblos entonces me inclino a la izquierda. La derecha no le importa tirarse y pisotear los derechos de los pueblos.
Ante todo esto, qué dilema tan grande el que surge para poder escoger, vuelvo a decir, no elegir, escoger, pues a uno sólo le dan la opción a escoger, elegir serí­a que todas las comunidades pudieran levantar desde el nivel comunitario, municipal, departamental y nacional lí­deres reconocidos y no empresarios que compran votos con dinero. Para mí­, tanto la familia como valor conservador, y el derecho a una vida digna son temas muy importantes para que el guatemalteco pueda considerar su voto.