Con la llegada de las lluvias, ha resurgido el dengue en Centroamérica y amenaza con causar epidemias en algunos países de la región, donde la variedad más letal, la hemorrágica, ha empezado a causar muertos.
En Honduras, el ministerio de Salud admitió sólo cinco muertes, 221 casos de dengue hemorrágico, aunque hay 780 sospechosos, y 4.737 del clásico, pero en las últimas cuatro semanas los hospitales públicos y algunos privados se saturaron de pacientes de la temida enfermedad, obligando también al gobierno a declarar «alerta amarilla» el 4 de julio, al igual que en El Salvador.
Después de registrar 23.362 casos de neumonías, de los que han muerto 252 personas, las autoridades salvadoreñas se preparan para frenar el avance del dengue, enfermedad provocada por el mosquito Aedes Aegypti, que ya habría causado una víctima mortal.
En lo que va de año, en El Salvador se han contagiado 1.697 personas de dengue clásico y otras 36 de dengue hemorrágico, aunque las autoridades contabilizan 4.679 casos sospechosos de dengue clásico y otros 84 sospechosos de dengue hemorrágico.
En Nicaragua, se han confirmado 43 casos de dengue hemorrágico y hay otros 202 sospechosos, mientras que del clásico hay 446 confirmados y otros 5.055 sospechosos. En lo que va de año han muerto cinco personas por la variedad más peligrosa.
Costa Rica es otro de los países más afectados, aunque hasta el momento no registraba muertos. Con más de 8.300 enfermos hasta la primera semana de julio, los casos de dengue se incrementaron en 123% en relación al mismo periodo del año anterior, y las principales zonas afectadas son las costas del Pacífico y el Caribe, las más frecuentadas por el turismo.
En Panamá se han registrado 1.251 casos de dengue clásico en lo que va de año. Mayanín Rodríguez, directora nacional de promoción de la salud, dijo que las cifras son estables.
En Guatemala, con 1.402 casos, se habían incrementado en 20% los casos de dengue a mediados de junio, en comparación con el 2006, y la enfermedad ya causó una muerte y existe riesgo de que se produzcan brotes epidémicos en la mitad de los 22 departamentos del país, según el Ministerio de Salud.
Ante el aumento de los casos de dengue en las últimas semanas, las autoridades de los países centroamericanos han emprendido campañas de fumigación para destruir los hábitats de los mosquitos y de sensibilización para recordar a los ciudadanos que eliminen las aguas estancadas de sus casas, en particular en macetas o neumáticos, excelentes caldos de cultivo para los criaderos de los mosquitos y mantengan limpio el entorno.
«Se está tratando de que las personas asuman que no son las autoridades de salud las responsables de mantener limpio el entorno sino los propios ciudadanos», dijo a la AFP Teresita Solano Chinchilla, jefa del programa de vigilancia epidemiológica del ministerio de Salud costarricense.
Y es que es un problema «cultural y no de actitud», señaló antes de agregar que la «gente está bien informada» sobre lo que debe hacer para eliminar los focos de los mosquitos transmisores del dengue.