Guatemalteco por nacimiento, hondureño de corazón, en realidad un buen hombre y un periodista deportivo sin fronteras. César Arnulfo Quezada Ortiz, nació el 19 de marzo de 1937 en la ciudad de Guatemala, sus aventuras de niñez y juventud transcurrieron en el popular barrio La Parroquia por los rumbos de la zona 6.
Óscar Fajardo Gil, Vicepresidente ACD
A mediados de la década de 1950 inició su trayectoria como comunicador en una radio de Ciudad de Guatemala y luego incursionó en los medios impresos.
Hacia 1957, el Cuartel de Maestranza o Castillo Matamoros, ubicado en la zona 1 de la capital chapina, contaba con dos equipos de softbol: Marte, de la Primera división, y Maestranza de la Segunda División, y cuando Moraga fue contratado para jugar en el primero, condición reglamentada era celebrar ocho juegos en la Segunda, para optar a la Primera. Por aquel equipo de Maestranza habían pasado figuras del calibre de Leonardo Portocarrero Solórzano “Rey de los Monos”, Antonio García “El Masaya”, Pedro Arceyuz Téllez “El Perico”, otros excelentes peloteros de la Tierra del Pinol, y naturalmente, Mario Ernesto Pellecer y César Arnulfo Quezada y Ortiz, cariñosamente “El Cuervo”.
En 1964 llegó a Honduras contratado por la Voz de Centroamérica, en San Pedro Sula, donde soportó la fuerte oposición del sindicato de periodistas. “Me quedé nada más porque don Jorge Sikaffi, dueño de la radio, me dijo que me quedara, que él iba a pelear por mí la parte legal”, recordó. Con su talento y la gracia de sus narraciones llegó a la capital, donde trabajó en Radio América. También fue comentarista del programa televisivo Cinco Deportivo. Posteriormente regresó a su país donde «me dijeron que ya no había trabajo para mí en Guatemala y yo dije ‘no hay problema, si el Señor ya quiere que yo me muera de hambre me voy a ir a morir a Honduras porque allí está la gente que a mí me quiere”.
«César es uno de los hombres de micrófono más versátiles que he conocido, y he alternado con muchos, algo que los catrachos no terminan de concederle ese don. He compartido muchos perifonemas con él, y el binomio es solicitado por muchos, sobre todo en materia beisbolera. ¿Como persona? Un caballero en toda la extensión del vocablo» comenta el cronista deportivo hondureño Greg Moraga.
El licenciado Marco Vinicio Velásquez Herrera, expresidente de ACD, recordó que conoció a César allá por 1970 en radio La Voz de la Eterna Primavera, en el programa Avances Deportivos. Después compartieron en Radio Cadena Maya, en TGW La Voz de Guatemala y en Radio Cadena Sonora.
“César era multifacético, tenía habilidad y amenidad para narrar futbol, ciclismo, beisbol, baloncesto, boxeo y hasta tenis de mesa. Recuerdo su gran creatividad y talento, especialmente una vez que tenía que presentar un programa artístico en Comayagua a través de la televisión hondureña pero, debido a problemas con un puente, los artistas no pudieron llegar. Entonces César cantó, bailó, contó chistes y hasta llegó al extremo de presentar un show de ventriloquia con un su muñeco. Fue extraordinario”, expresó Velásquez Herrera.
Personalmente tuve la oportunidad de conocer y ser compañero de trabajo de nuestro querido “Cuervo” en 1996, en Emisoras Unidas. Compartimos solo transmisiones de futbol, aclaración justa y necesaria porque él era un narrador versátil con conocimientos sobre varios deportes. Recuerdo una vez que retornábamos a la ciudad capital luego de un partido en el estadio Las Victorias de Chiquimula, los más de 150 km de recorrido nos resultaron pocos para escuchar su colección de boleros interpretada por los famosos tríos Los Panchos, Los tres Reyes, Los tres Ases, y otros. Con cada canción salían a relucir anécdotas, comentarios y apuntes históricos.
En el año 2000, por iniciativa de Manuel “El Pájaro” Marroquín Ortega y Arnulfo Agustín Guzmán, que compartimos con César Quezada la aventura de llevar un equipo de Radio Cadena Sonora para transmitir la Vuelta a Guatemala, él y yo como narradores; el equipo se completaba con Marco Vinicio Velásquez, Víctor Manuel de la Roca, Manuel Marroquín Ortega, Arnulfo Agustín Guzmán, Miguel Ángel Pérez. Recuerdo que el promedio de edad era tan alto que a nuestra móvil le decían la “unidad Jurassic”.
César enviudó luego de permanecer mucho tiempo casado con la hondureña Gertrudis Williams con quien procreó seis hijos, dos chapines y cuatro hondureños.
En distintas épocas, a lo largo de más de 4 décadas, Quezada laboró además para los diarios La Tribuna y Tiempo, Canal 11, y varios medios electrónicos.
A “Checha” Quezada se le recordará por haber sido fundador de la Liga de beisbol Horacio “Chito” Reina de Tegucigalpa y ser el primer presentador del programa de “5 Deportivo”, con el cual sentó cátedra de producción en la televisión catracha.
Sin lugar a ninguna duda, fue uno de los más ingeniosos narradores que he conocido. Ameno, sencillo, y coloquial, escribía sus columnas en serio sin regatearle chispa y jocosidad al tema, era acertado y al mismo tiempo respetuoso en sus comentarios. Tenía una sonrisa de oreja a oreja que lucía con bastante frecuencia. Y su risa… siempre me pareció la de un patojo haciendo travesuras. Era muy ocurrente y le gustaba salpimentar sus relatos con frases tales como: “a lo mejor, quizá, talvez, quién sabe, probablemente acaso…”, “el árbitro suena la ocarina”, “levantó la bandera el lai-man”, “lo agarraron en el gallinero ajeno”, «Este arroz ya se cocinó», «Se está defendiendo como gato panza arriba» y la mejor era aquella de «Este partido esta tan aburrido que mejor voy a contar un chiste».
El viernes 23 de diciembre del año pasado, César y su hija Marnie sufrieron un accidente cuando se transportaban en una motocicleta en la ciudad de Comayagua, a 87 km de Tegucigalpa. César salió afectado por un fuerte golpe en la cabeza, por lo que requirió ser hospitalizado. Durante varios días su salud fue un péndulo entre grave y estable. El jueves 26 enero 2012 me comuniqué telefónicamente con Marnie Quezada Williams, a quien contacté gracias a la colaboración del colega Carlos Rodríguez Franco; quien me indicó sentirse tranquila y agradecida con Dios: «mi papá se acaba de salvar, después de 3 días de estar en un coma hepático. Hace 42 horas (la noche del martes) que recuperó el conocimiento, le retiraron los aparatos y reaccionó favorablemente. Aún se encuentra internado en Clínicas Médicas Enmanuel, en Comayagua. Los doctores consideran la posibilidad de darle de alta esta tarde. Confiamos en su recuperación total aunque sea lenta. Por el momento habla con dificultad».
El lunes 06 de febrero Marnie me contó que César había sido hospitalizado nuevamente por trastornos en el hígado, su estado era bastante delicado. La noticia que no queríamos recibir llegó el viernes 10 de febrero, a temprana hora de ese día dejó de existir César Quezada, pocas semanas antes de cumplir 75 años de edad.
Se ha ido uno de los grandes periodistas deportivos de Centroamérica. Don Cuervo ha emprendido el vuelo a la eternidad, para reencontrarse con Dios Padre, en quien siempre confió y fue su fortaleza. Que en paz descanse.