Me agradó mucho ver que desde hace algunos días están circulando por correo electrónico y en redes sociales los listados de candidatos a diputados por el Congreso de la República para las elecciones del 11de septiembre.
Frecuentemente se comete el error de darle demasiada importancia a la elección de presidenciables y vicepresidenciables y poco se sabe de la conformación del más importante aparato de poder estatal. A mi parecer la llave de un mejor futuro para Guatemala se guarda en el Palacio Legislativo y no estar enterado de los aspectos mínimos de su conformación puede ser un error mucho más caro que el de elegir a un pésimo jefe del Ejecutivo.
Discutiendo los listados con varios amigos y compañeros me pareció prudente utilizar este espacio para tratar de explicar cómo se elegirá y quedará integrado el próximo Congreso, al menos en sus características básicas.
Primero es bueno aclarar, porque mucha gente aún cree que así es, que los votos que sacan los candidatos a presidente ya no tienen nada que ver con la conformación del Congreso. Cierto es que antes una porción del Congreso era elegida de esta manera, pero hace varias elecciones que se eliminó esta penosa práctica.
El Congreso de la República se compone actualmente de 158 escaños, número que proviene de un sencillo cálculo de 1 diputado por cada 80 mil habitantes. Existen 23 Distritos Electorales, uno por cada uno de los departamentos del país más el Distrito Central o Metropolitano. Cada uno de los Distritos Electorales ocupa un número de escaños determinado por la cantidad de población que alberga. El 11 de septiembre el Tribunal Supremo presentará a los electores guatemaltecos 24 papeletas distintas para elegir diputados y cada uno emitirá su sufragio en dos de ellas. La papeleta para elegir diputados a la que todos los guatemaltecos aptos para votar tendremos acceso será la del Listado Nacional, adicionalmente y dependiendo de donde resida podremos elegir en una de los Distritos Electorales. La lista que más escaños representará será la del Listado Nacional con un total de 31 diputados, le sigue el Distrito Central con 19, el departamento de Guatemala –sin contar la ciudad– con 11, Huehuetenango con 10, Alta Verapaz con 9, San Marcos con 9, Quiché con 8 y los restantes 17 departamentos con un total compartido de 61 diputados. De esta manera se conforman los 158 diputados del Congreso de la República. A todos los guatemaltecos nos tocará entonces elegir dos listados y es de suma importancia que estudiemos y analicemos quiénes están en los listados de cada partido político. Lamentablemente los votantes solo podremos votar por los listados completos de los partidos políticos, porque claro, la tendríamos mucho más fácil si pudiéramos escoger personas y no grupos de personas. El hecho es que la de escoger entre los listados no es una tarea fácil porque muy probablemente nos gusten candidatos que están en distintos listados por lo que tendremos que escoger el que finalmente llene mejor nuestras expectativas.
Es una realidad que nuestro débil sistema legal actual confiere poderes y prebendas a nuestros legisladores que les permiten abusar de su posición y esto les sirve como incentivo para no actuar correctamente y en la mayoría de los casos se convierten en traficantes de influencias y protagonistas de actos de corrupción. Por lo tanto, me parece adecuado elegir listados en donde encontremos personas con sentido común y vidas honorables como condiciones sine qua non, que aceptan que el sistema tiene fallas graves y lejos de aprovecharse de estas estén dispuestos a cambiarlo.
Lamentablemente tendremos que dejar la preparación y la experiencia para cuando nuestro sistema sea lo suficientemente seguro y confiable. La analogía es muy sencilla pero vale la pena mencionarla: si para dirigir su empresa usted tiene que escoger entre un tipo muy preparado, con todas las acreditaciones del mundo pero sabido ladrón y pícaro y un tipo sin preparación pero con buenas intenciones, sentido común y de nombre honorable ¿a quién contrataría?