El comercio mundial cayó un 12%


José Manuel Barroso (D), comisario europeo, y Pascal Lamy, de OMC. FOTO LA HORA: AFP GEORGES GOBET

El volumen del comercio mundial retrocedió el año pasado un 12%, una caí­da sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial, y 2010 se anuncia mediocre, indicó hoy en Bruselas el director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Pascal Lamy.


El comercio mundial «también fue ví­ctima de la crisis y se contrajo un 12% en volumen en 2009», señaló Lamy durante una conferencia organizada por el Centro de Polí­tica Europea, basado en Bruselas.

La caí­da, la más importante desde 1945 y consecuencia de la crisis financiera y económica que sacudió el planeta el año pasado, supera las anteriores previsiones de la OMC, que habí­a proyectado un repliegue del 10%.

En 2009, la actividad económica mundial retrocedió «alrededor del 2,2%» y el número de desempleados alcanzó un nivel récord de 200 millones de personas, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), recordó Lamy.

Según Lamy, la caí­da brutal de los intercambios comerciales se explica principalmente por el repliegue de la demanda de las principales economí­as, así­ como por la caí­da de los préstamos bancarios para financiar las transacciones comerciales.

«En menor medida», también pesó «el aumento de los derechos de aduana o subvenciones» para proteger a los mercados nacionales, estimó el director general de la OMC.

Esta tentación proteccionista vuelve más imperiosa, según Lamy, la necesidad de relanzar las negociaciones de la ronda de Doha para la liberalización del comercio mundial, lanzadas en 2001 y que deberí­an haber concluido en 2005.

Es «imperativo económicamente concluirla» este año, destacó, pese a que las negociaciones están en punto muerto desde 2008 y adolecen de una falta de implicación notoria por parte de Estados Unidos.

Un impulso a la ronda de Doha, que pretende levantar los obstáculos a los intercambios comerciales para ayudar a los paí­ses pobres, infundirí­a una cierta confianza frente a las previsiones económicas endebles para 2010, según Lamy.

Las primeras señales de recuperación económica corren el riesgo de borrarse en Europa y Estados Unidos, principalmente.

El martes, el í­ndice de confianza de consumidores en Estados Unidos registró un repliegue más pronunciado de lo previsto y el de los industriales alemanes experimentó también una caí­da imprevista, la primera en diez meses.

En el seno de la Eurozona, la inquietud se reavivó con la reciente publicación de los datos sobre el crecimiento en el cuatro trimestre de 2009.

El Producto Interior Bruto (PIB) de los 16 paí­ses que comparten la moneda única sólo creció 0,1% en los últimos tres meses del año pasado, tras registrar un avance del 0,4% en el trimestre anterior.

La catastrófica situación de las finanzas públicas griegas y los temores sobre la salida de la crisis a medio plazo de las economí­as española y portuguesa refuerzan la idea de que una recuperación económica sólida podrí­a no estar a la vuelta de la esquina.