Clasificado como una de las siete maravillas del mundo, el Coloso de Rodas era una gigantesca estatua del dios griego Helios, erigida en la isla de Rodas, Grecia, en el siglo III a. C. por el escultor Cares de Lindos.
Hecha con placas de bronce sobre una armazón de hierro, la estatua representaba al dios griego del sol, Helios. Su tamaño era de 32 metros de altura y pesaba aproximadamente 70 toneladas. Sus dimensiones son bastante similares a las de la Estatua de la Libertad ubicada en Nueva York, aunque el Coloso descansaba sobre una plataforma menos elevada.
Todo lo que se conoce sobre esta famosa estatua se debe a las noticias que nos han dejado los escritores antiguos Polibio Estrabón y Plinio, y a las crónicas bizantinas de Constantino VII Porfirogéneta, Miguel el Sirio y Filón.