La entrevista que celebraron, a solas, S.S. Benedicto XVI y el presidente Bush en la oficina Oval, y que fue grabada por el gobierno estadounidense para que de ella, como de todo lo que ocurre en la Casa Blanca, quede constancia; «Nuestro corresponsal», dijo radio Escandinava, «tuvo acceso a la presentación de ese video y de ello queremos «contarles a ustedes».
«El anfitrión Bush recibió con efusivo abrazo a S.S. Benedicto, un abrazo que destanteó al alemán quien al querer abrazar al presidente, soltó el báculo que cayó sobre el piso de mármol produciendo escandaloso ruido. En la prisa de S.S. por recogerlo vino el correspondiente agachón que ejecutó el presidente para también recogerlo y sus cabezas chocaron y la mitra papal también cayó al suelo» nos contó el locutor.
«Fue una escena divertida», afirmó el escandinavo «lo cual sirvió para romper el hielo y se oyó la carcajada que espontáneamente prorrumpieron ambos dignatarios»
«Mr. Bush, en medio del cabezazo que le asentó al Santo Padre, pues se sintió un poco avergonzado», continuó el escandinavo, «confundido recogió el báculo con la diestra y con la siniestra levantó la mitra colocándola presurosamente sobre la testa papal… pero, se la colocó al revés».
«No tengas pena, Giorgio, le dijo don Benedicto al avergonzado Presidente» continuó la radio. «El Cardenal Camarlengo se acercó a colocar, como Dios manda, la mitra sobre la testa papal, y muy atinadamente les sugirió, a ambos que se calmaran, y ya sentados, les ofreció algo de beber. El Santo Padre pidió un Camparini doble, y Mr. Bush un escocés con soda, también de artillero. Ya con su trago en mano se inició amena plática olvidándose de los iraquíes, los inmigrantes y los curas pederastas» dijo el escandinavo.
«Eso sí, llamaba la atención», continuó el locutor » contemplar la frente de S.S. que, por el golpe frontal que le había asestado Mr. Bush, principiaba a hincharse formando un rojo chichón que hacía juego con el color del Campari. Mr. Bush muy oportuno, sacó de su trago un trozo de hielo y con delicadeza se lo colocó sobre el chichón a Su Santidad», nos dijo el locutor.
«Por eso, es probable que en las escenas que pase la tele, el mundo note un bodoque en el lado derecho de la frente pontificia quién tratará de tapárselo con la mitra» nos dijo el locutor.
«Cuando se habían tomado su trago el igualado de Bush le preguntó al Papa ¿no querés que nos tomemos el penúltimo?» y ahí terminó el video.